- Por Ricardo Jiménez
RedFinancieraMX
El mercado de cambios de México al ser de un país emergente se encontró expuesto al efecto de la emergencia sanitaria “coronavirus”, luego de expandirse en los cinco continentes del mundo, generando fuertes presiones en la moneda mexicana.
El tipo de cambio peso-dólar bajo ese contexto registró su peor depreciación en lo que va de este año, pues durante la semana pasada presentó una pérdida de valor de 5.29%, equivalente a una depreciación de 99.70 centavos, para alcanzar un precio de 19.8610 pesos, sin embargo, en el mismo lapso se observó una cotización máxima de 19.8942 pesos por billete verde.
El peso mexicano durante febrero presentó un saldo negativo de 5.27%, con un precio promedio de 18.85 pesos por dólar. Las pérdidas se concentraron en las últimas dos semanas del mes, donde se observó una cotización mínima de 18.53 pesos y un nivel máximo de 19.90 pesos por billete verde.
La depreciación del peso mexicano no fue la excepción, sino también las monedas de otros países emergentes también sufrieron los efectos del “coronavirus”, como el rublo ruso, el peso colombiano y el rand sudafricano que mostraron depreciaciones superiores al 4% durante la semana previa.
En lo que va de este año, las monedas con mayores pérdidas fueron de países de mercados emergentes, sobre todo el rand sudafricano y el real de brasileño con una depreciación de 10.5% cada uno.
En contraste, el yen japonés mostró una apreciación de 3.35%, ante el incremento en la demanda por activos refugio. Además, el euro recuperó terreno, apreciándose 1.71% a 1.1035 dólares por euro, al tratarse de una divisa de economías avanzadas.
La depreciación de peso mexicano se debió principalmente a un incremento en la percepción del riesgo a nivel global por el brote del “coronavirus”, principalmente en la última semana de febrero, cuando creció el número de casos fuera de China a cerca de 5,000, la mayoría de estos en Asia y Europa.
La confirmación de tres casos en México eleva la probabilidad de que se confirme nuevos casos en los siguientes días y que se tomen medidas de contención, lo que implica un riesgo a la baja para la actividad económica mexicana.
El escenario del peso mexicano en el corto plazo se verá complicado, sobre todo porque seguirá la inquietud de los mercados principalmente de los países emergentes en el que se encuentra México, con amplias posibilidades de mantenerse las cotizaciones por arriba de los 19.50 pesos por dólar.
La elevada incertidumbre y el fuerte ajuste en los mercados financieros internacionales, los mercados están a la espera de acciones coordinadas de bancos centrales como el Banco Central Europeo y la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, y de acciones por parte de los gobiernos.
Por lo pronto, los mercados ya descuentan recortes en la tasa de interés de referencia de la Fed para la reunión de abril y del Banco Central Europeo para septiembre, sin embargo, será importante ver los indicadores económicos sobre todo de Estados Unidos.
El mercado de cambios estará atento y en espera de la evolución de los indicadores económicos a nivel mundial, de la postura monetaria de los principales bancos centrales en el mundo, y de los gobiernos ante esta crisis sanitaria.
En Estados Unidos se espera la encuesta empresarial del ISM de manufacturas de febrero estimado en 50.5 puntos (rango de expansión), y el ISM no manufacturero igual mes con un pronóstico de 51 puntos.
En el mercado mexicano, se espera el anuncio de las remesas familiares a febrero, y el dato de producción y exportación de vehículos a febrero, además, de la confianza del consumidor correspondiente a igual mes.