Concluye un sexenio que se caracterizó por promesas incumplidas

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  • Deja muchos pendientes en economía, salud y seguridad: CEESP
  • Por Gerardo Flores Ledesma

RedFinanciera

El sector empresarial del país calificó al de AMLO como el sexenio de las promesas incumplidas, porque fracasó en la lucha contra la corrupción, la inseguridad y la violencia.

A todos esos incumplimientos, puntualiza el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), se suma el nulo acceso a servicios de salud, la falta de medicamentos y los tratamientos para enfermedades graves, todos ellos relevantes en el bienestar de las familias, especialmente de menores ingresos,

En su más reciente reflexión económica y social, el CEESP precisa que todas las promesas incumplidas por el gobierno de AMLO tuvieron un costo significativo para los hogares.

Por ejemplo, la corrupción, inseguridad y violencia, aun cuando las autoridades lo minimicen, durante 2023, costó a la población 4.9 billones de pesos, es decir el 19.8% del Producto Interno Bruto (PIB).

Se agrega que la promesa de crecer al 6% anual se vino abajo con el impacto de la pandemia. Sin embargo, su recuperación posterior, además de ser muy lenta en comparación con muchos países, también fue menos dinámica, sobre todo en los últimos años del sexenio cuando muestra una clara tendencia a la baja para acercarse a niveles del 2.0%. Evidentemente esto atenta contra la prosperidad y el bienestar de la población en general.

Se podría decir que, entre otros objetivos incumplidos, el más relevante por su incidencia en el bienestar de las familias, especialmente de menores ingresos, es la mejora del sector salud.

El desmantelamiento del seguro popular significó que en 2020 casi 16 millones de personas perdieran su acceso a servicios de salud, cifra que prácticamente se duplicó para 2022 como resultado de la evidente ineficiencia del INSABI.

La Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2023, confirma el deterioro del sector salud en lo que va del sexenio. Sus resultados muestran que entre 2018 y 2023 fueron 22.7 millones de personas las que perdieron su afiliación a alguna institución de salud y 15.7 millones dejaron de asistir a las instituciones del sistema público, como hospitales generales e institutos del gobierno federal.

Los hogares tuvieron que sustituir el servicio público por el privado. Así, la demanda de servicios médicos en farmacias privadas aumentó en 9 millones de personas y la atención en clínicas y hospitales privados creció en 9.8 millones. Por esa razón, entre 2018 y 2022, el gasto de los hogares en salud aumentó 30.9%, como reveló el INEGI en su Encuesta de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH).

Con el objetivo de reestablecer y mejorar los servicios de salud, en 2021 el Presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su deseo de tener un sistema de salud semejante al de Dinamarca, que es uno de los más eficientes a nivel mundial. Para alcanzarlo, estableció la fecha de marzo del 2024, sin embargo, el objetivo no se cumplió y aún nos mantenemos muy alejados de cualquier parecido con ese sistema de salud.

El CEESP sostiene que nos falta muchos para tener un sistema de salud como el de Dinamarca, porque mientras aquel país destina el 9.5% de su PIB al gasto en salud, en México la proporción de 5.5%.

Asimismo, mientras que en México la tasa de mortalidad por causas prevenibles, -tasa estandarizada por edad por cada 100 mil habitantes-, fue de 435 en 2021, en Dinamarca fue de 120.

En cuanto a la tasa de mortalidad por causas tratables, en México se ubicó en 230 y en Dinamarca en 54. En ambos casos, nuestro país ocupa el último lugar entre los países de la OCDE.

En México, la cobertura de población para un conjunto básico de servicios es de 72%, y en Dinamarca es del 100%, y mientras en este país el 84% del financiamiento tiene su origen en esquemas gubernamentales, en México esa cifra apenas llega al 24%.

Finalmente el CEESP hace un llamado al nuevo gobierno para que le dé prioridad al tema de la salud, porque “la población no debe seguir enfrentando problemas de acceso a los servicios de salud y la falta de medicamentos y tratamientos para enfermedades graves”.