Se registran más de 300 millones de ataques cibernéticos por mes en el mundo

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  • México registró 98 millones de ataques de acceso remoto
  • Genetec nos dice cómo elegir el sistema de gestión de video adecuado

RedFinanciera

Los ataques cibernéticos entre enero y febrero de este año registraron más de 22.6 millones. De acuerdo con Karspersky, desde abril de 2020 hasta febrero de 2021, a nivel global, nunca ha habido una tasa de ataques por debajo de los 300 millones al mes, con un récord de más de 409 millones durante noviembre de 2020.

En febrero, casi a un año de que dio inicio la pandemia por COVID, se produjeron 377.5 millones de ataques; México registró 98 millones de ataques de acceso remoto, uno de los países de Latinoamérica con el mayor número de ataques en 2020.

Es por esto que hoy más que nunca, se ha vuelto una prioridad para las organizaciones proteger a las personas, bienes y activos, un indicador de esto es que los ingresos por ventas de soluciones de hardware, software (de analítica de vídeo y sistemas de gestión) y servicios crecerán a un ritmo anual del 10,4%, hasta situarse en los 74.600 millones de dólares en 2025*.

Además, para las empresas es un tema de misión crítica mantener la seguridad de todos y con ello minimizar riesgos. Y es en donde la videovigilancia se vuelve una de las estrategias más importantes, por lo que elegir el Sistema de Gestión de Video (VMS), de acuerdo con Genetec -proveedor líder de tecnología de seguridad unificada, seguridad pública, operaciones y soluciones de inteligencia empresarial- debe ser un proceso en el que hay que determinar necesidades, presupuesto, facilidad de uso, y otros elementos que lleven a la selección adecuada ante la variedad de soluciones VMS que actualmente existen en el mercado.

Una solución de videovigilancia consta de varios componentes, la elección de un proveedor de cámaras de videovigilancia de calidad es una parte importante, pero el VMS que gestiona esas cámaras es el que hace el “trabajo pesado” entre bastidores.

Al elegir un VMS es también fundamental tener en cuenta el futuro; en vez de limitarse a las preocupaciones inmediatas en materia de seguridad, debe considerarse que las soluciones de seguridad y la tecnología de video evolucionen con el tiempo a la par de sus necesidades.

La escalabilidad, la integración de cámaras IP, la preparación para soportar las necesidades informáticas de video HD, FHD y 4K y la adaptabilidad a topologías de red complejas y nuevas soluciones de almacenamiento, son consideraciones primordiales a la hora de elegir una plataforma VMS moderna, eficaz y eficiente.

La arquitectura abierta es vital

Un VMS debe ofrecer una gran compatibilidad con una amplia gama de cámaras, codificadores y equipos de videovigilancia. Las cámaras de terceros y sus funciones deben poder programarse directamente desde el VMS. Asimismo, es fundamental que el VMS pueda configurar una serie de parámetros importantes, como: descubrir la cámara o el codificador en una red IP, la dirección IP, la velocidad de fotogramas, resolución, detección de movimiento (dentro de la cámara o basada en el servidor), velocidad de bits, entradas/salidas de audio, streamings de video que ofrece el dispositivo, actualización del firmware y otros aspectos similares.

Nadie quiere tener que alternar entre aplicaciones de software para realizar comandos simples que deberían estar disponibles en la plataforma VMS.

¡La nube es el límite!

La posibilidad de que el VMS pueda estar bajo opciones híbridas o basadas en la nube permite ampliar la funcionalidad de un sistema local o incluso sustituirlo, así como permitir la continuidad de los negocios y sustentabilidad de estos. Las soluciones en la nube pueden reducir la inversión en infraestructura de TI y ayudar a un departamento de seguridad a ser más ágil. Además, un sistema de videovigilancia basado en la nube puede desplegarse en tiempo récord, ya que no se necesitan servidores ni descargas de software.

Una solución híbrida puede responder a la necesidad de tener un periodo de retención más largo, almacenando los archivos de video y datos a largo plazo en la nube, mientras se almacenan los archivos a corto plazo en los servidores locales.

Un sistema híbrido también puede mejorar la redundancia del almacenamiento de video al proporcionar una copia de seguridad en caso de que falle el hardware local, entre muchos otros beneficios.

Para las empresas que prevén una expansión, un sistema híbrido permite añadir sitios adicionales junto con su crecimiento sin tener que invertir en hardware adicional en la ubicación central.

Por otro lado, es fundamental contar con un VMS que emplee una estrategia de seguridad que proteja su sistema tanto contra las amenazas físicas como contra las cibernéticas con múltiples capas de defensa, incluyendo el cifrado, la autenticación de múltiples factores y la autorización. Al mismo tiempo, un VMS debe permitir a los usuarios la protección de la privacidad para ayudar a los clientes a cumplir con las regulaciones globales de privacidad ante la adquisición y retención de datos sensibles por la recopilación de imágenes de video de personas en público o en el entorno de trabajo.

“Hoy más que nunca la privacidad es un punto clave al momento de seleccionar soluciones de seguridad, por lo que deben considerarse soluciones con funcionalidades adicionales que oscurezcan automáticamente los rostros de las personas que se encuentran dentro del campo de visión de una cámara, para que los operadores de seguridad sólo vean lo que necesitan ver”, Gigi Agassini, CPP, Gerente del área de desarrollo de negocios, Genetec México.

Los sistemas de gestión de videovigilancia son un aspecto muy importante de la seguridad física pero sólo una parte de una solución integral. El control de acceso, soluciones de ALPR y alarmas, son muchos de los componentes que contribuyen al éxito de las operaciones diarias de un negocio y los operadores deben gestionarlos simultáneamente para mantener la seguridad. Esto puede resultar difícil cuando hay que poner en marcha múltiples y complicados sistemas en paralelo. En cambio, hay que centrarse en seleccionar un VMS que forme parte de una plataforma unificada.
Hay mucho que considerar al elegir un sistema de gestión de video. La buena noticia es que la tecnología sigue mejorando, al igual que las opciones. La videovigilancia es una parte integral de una solución completa de seguridad física. Y la elección de un sistema VMS moderno no sólo puede mejorar la seguridad, sino que también puede servir como socio estratégico de la dirección al ayudar a mejorar las operaciones y generar ingresos adicionales.