- Sindicalismo
- Por Carlos Ramos Padilla*
- @cramospadilla
RedFinanciera
De aquel tan criticado sindicalismo monolítico y corporativo de Fidel Velázquez se ha transitado a grupúsculos de interés político y de botín económico. La defensa de los trabajadores ya es un membrete para sólo enriquecer brutalmente a sus dirigentes.
Donde ha quedado el sindicato de pilotos aviadores ante la imposición del AIFA; dónde el de mineros con la tragedia de Coahuila: donde el de maestros con la llegada de “Lety” a la SEP: dónde…?
He subrayado que la maestra Elba Esther Gordillo mantuvo una congruencia ideológica hasta convertirla, por su liderazgo, en guía de sindicatos en América Latina bajo la firme conducta de evitar chantajes sociales o violencia callejera. Desde entonces no se ha registrado una dirigencia similar ni con Romero Deschamps, Joel Ayala, Gómez Urrutia u otros.
Pongamos nuevamente el ejemplo del SNTE, no de la CNTE. A pesar de la serie de señalamientos contra el exlíder Juan Díaz de la Torre, por desvíos de recursos o complicidad con una extranjera de origen uruguayo, se percibe su imposición e influencia en las Entidades en donde se pretende renovar a líderes seccionales.
Juan José García Mora es encargado de la administración y finanzas del gremio magisterial y operador de Díaz de la Torre. Es en los Estados de Coahuila, Jalisco y Durango, donde las elecciones seccionales han generado una lucha de pronóstico reservado.
Se prevén fracturas y rompimientos derivados de intereses de poder de personajes que aspiran a dirigir el terreno estatal a través de la agrupación sindical.
Y aún la dirigencia sindical no ha confirmado ni desmentido si la líder extranjera Helena Sanguinetti, antes de obtener la nacionalidad mexicana ya manejaba los recursos del SNTE y se había hecho de propiedades.
Los sindicatos continúan moviéndose en la absoluta libertad e impunidad presupuestaria.
La ambición de poder supera al cumplimiento de sus obligaciones gremiales y luchan por colocarse en el apreciable confort de sentirse intocables.
En estos días. los
mineros mexicanos que observan la insuficiencia e incapacidad del gobierno por salvar la vida de sus compañeros atrapados en Coahuila, guardan un sonoro silencio a través de su agrupación sindical.
Decía también de los pilotos aviadores, que desde la barandilla sólo ven cómo hemos sido degradados a categoría dos por figurar como un país de riesgo y peligro en su espacio aéreo y en sus terminales aéreas.
Los petroleros, sumisos ante la burla de Dos Bocas en donde han sido reprimidos por la fuerzas de seguridad al solicitar el pago justo de sus horas extras.
Así las cosas. Así el sindicalismo. Así las ambiciones.
*Conductor del programa VaEnSerio, mexiquense tv canal 34.2 ; Izzi 135 y mexiquense radio.