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  • Pleito de vecindad
  • Por Carlos Ramos Padilla (*)

RedFinanciera

Veracruz está que arde, lleno de corrupción, con un mal gobierno, periodistas y ciudadanos asesinados y ahora, el pleito de vecindad que ha provocado AMLO con el apoyo al gobernador Cuitláhuac García por el caso de la aprehensión  de José Manuel del Río.

El respaldo público generado por Marcelo Ebrard al senador Ricardo Monreal en relación al encarcelamiento de Del Río Virgen, provocó una pugna entre personas identificadas con el proyecto presidencial de Claudia Sheinbaum e integrantes cercanos a Ebrard.

Un pleito más por el apetito de una candidatura presidencial. Esta semana políticos afines a la línea “dura” de Morena acusaron a Ebrard por “dispararse en el pie” o “sacar el plumero” con su respaldo a Monreal.

El griterío entre la jefa de gobierno y el “canciller” se abrió a la opinión pública mundial luego de la tragedia de la Línea 12 en donde ambos salieron exonerados (fue culpa de los pernos) pero el arrebato político se incentivó.

La fractura tuvo su origen el 24 de diciembre cuando Ricardo Monreal viajó a Veracruz para visitar a Del Río Virgen, político adscrito a Movimiento Ciudadano (MC) y secretario de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, al que la fiscalía veracruzana acusa de participar o promover el asesinato de René Tovar, entonces candidato a presidente del municipio de Cazones de Herrera.

Ya había comentado en redes que un día después de que Monreal denunciara una “persecución política” calificó al gobernador veracruzano como un “gobernante extraviado y ofuscado por su incapacidad”.

Ebrard lanzó el volado y publicó su respaldo a pesar de que el día anterior AMLO enfatizó que le tiene “mucha confianza” a Cuitláhuac García, de quien señalo: “es uno de los mejores gobernadores que ha tenido Veracruz, incapaz de cometer una injusticia”.

AMLO está pagando facturas de cómplice con el veracruzano por el espaldarazo incondicional que ha recibido aún antes de que el tabasqueño llegara a la Presidencia.

Dante Delgado no se ha quedado quieto y toda vez , en cualquier tribuna, habla de la ineficiencia del Ejecutivo.

Recuerdo en mayo del 2001, después de que la Fiscalía General de la República anunciara la investigación en contra de Samuel García y Adrián de la Garza por los presuntos delitos electorales ejercidos durante la campaña a la gubernatura de Nuevo León, Dante Delgado fue preciso en el mensaje a AMLO: “Saque las manos del proceso electoral” y dejar el proceso electoral en paz y que se dedique a gobernar para todos”.

De entonces para acá, Dante ha marcado sus límites con AMLO y aún se resiste en participar en una alianza partidista para el 2024. Muchos anticipan un desenlace violento, luego de la terquedad del gobernador veracruzano de cumplir las órdenes del presidente.

Y esto llevaría al extremo de que Movimiento Ciudadano solicite la “desaparición de poderes” en la entidad, asunto que bien podría promover Monreal denunciando violación de derechos humanos y persecución política.

No perdamos de vista que Dante Delgado conoce bien la geografía del Estado y su composición política, económica y social.

Bueno, en el archivero guarda antecedentes sobre la biografía de Cuitláhuac García que de exhibirlos caeríamos en un asunto espejo al de Carlos Ahumada.

(*) Conductor del programa VaEnSerio, MexiquenseTV, canal 34.2 (IZZI 135)