- En las urbes, una familia sólo puede cubrir el 75% del costo de la canasta básica alimentaria: UPAEP
- No se pueden cubrir gastos de salud, educación, vivienda, calzado, vestido, transporte, entre otros
RedFinanciera
La inflación de la primera quincena de junio a nivel nacional alcanzó un máximo de 6.02%, situación que no se ha presentado en los últimos 19 años; y en algunas entidades del país, como Puebla, la variable alcanzó en la primera quincena de junio 7.08%, y el Banco de México, espera que todavía se pueda regresar a la meta estimada que era del 3% pero hasta el tercer trimestre del 2022.
El salario mínimo resulta insuficiente para cubrir las necesidades básicas de alimentación de una familia integrada por cuatro personas, señaló Alfonso Mendoza Velázquez, Director del Centro de Investigación e Inteligencia Económica CIIE-UPAEP.
Dijo que una familia en un ambiente urbano con un salario mínimo, sólo podría cubrir el 75% del costo de la canasta básica alimentaria en Puebla, mientras que una en un ambiente rural, con un salario mínimo cubriría justo el costo de la canasta básica en Puebla; y ambas no podrían cubrir gastos de la canasta ampliada que incluye gastos de salud, educación, vivienda, calzado, vestido, transporte, etcétera.
Comienza a preocupar la inflación que se está registrando en el país, el nivel de los precios y su crecimiento, determina en muchos sentidos la capacidad de compra que tiene la población y en particular es importante conocer el comportamiento del precio de los alimentos, explicó el académico.
Comentó que la inflación subyacente creció 4.58% y mientras que eso sucedía, la inflación no subyacente que es a la que las personas se enfrentan día con día, creció 10.71%, que es un incremento muy fuerte y de ésta, los productos agropecuarios crecieron 7.22% y los energéticos 13.36% y como respuesta a esto, el Banco de México aumentó la tasa de interés de referencia a 25 puntos base hasta 4.25% lo que se vio reflejado en los mercados internacionales y de manera particular en el mercado cambiario y de ahí se puede se observa una apreciación del peso frente al dólar muy clara y franca.
Asimismo, refirió que es importante conocer el impacto que está generando la inflación en la evolución del costo de la canasta básica alimentaria nacional, pero en particular en las entidades federativas y en especial en Puebla.
En su intervención Mariano Guzmán, Data Scientist en el CIIE de la UPAEP, dijo que junto con Gluliana Galeazzi, adaptaron la metodología que propone el CONEVAL para llevar adelante este estudio que se realizó en el Centro de Investigación e Inteligencia Económica, para presentar estas canastas básicas en Puebla; donde esta canasta básica cumple con dos puntos centrales, la primera que es representativa del consumo de los hogares en el estado de Puebla, y a diferencia de los métodos tradicionales para calcular la canasta alimentaria, “nosotros construimos una canasta particular del consumo tanto en el estado de Puebla como en la ciudad de Puebla, y además, esta canasta cumple con los requerimientos nutricionales”.
Mariano Guzmán manifestó que para hacer los cálculos de la canasta básica en estudio, se calculó el consumo de determinados productos en un grupo de familias, y se calcularon los precios, para dar paso al armado de una canasta básica del estado de Puebla y obtener unos resultados más robustos, ya que presentan de mejor manera lo que consume la gente y también sus costos en los entornos urbanos y rurales del estado y de cuánto dinero están destinando las personas para comprar estos productos.
Mendoza Velázquez indicó que es importante construir una canasta básica alimentaria que refleje los patrones de consumo de la población en el estado y que no se aleja mucho de lo que consumen los mexicanos a nivel nacional, pero si es importante identificar además de los alimentos, las proporciones de los mismos, porque esto permitirá conocer cuánto gastan en cada uno de estos alimentos y a la vez conocer si es posible para una persona que gana el salario mínimo mantener una familia de cuatro integrantes.
Dijo que en la composición de la canasta básica alimentaria urbana en Puebla y que contiene 44 alimentos, se replica mucho con el comportamiento que se tiene a nivel nacional, como es el consumo de leche, tortillas, pan y huevo, es decir, de lo que es la alimentación básica del poblano y a la vez identificar el precio de los mismos a partir del 2018 y hasta el 2020 y la evolución que se registró con respecto al costo de la canasta básica.
Advirtió que el impacto inflacionario que se tiene a nivel nacional en la primera quincena de junio, puede impactar el costo de la canasta básica, al registrar una tendencia alcista muy pronunciada y el costo de la canasta básica que se ha desarrollado en el CIIE sigue la metodología del CONEVAL, se encuentra entre las canastas básicas menos caras del país, después de Guanajuato, y representa el cuarto lugar entre las canastas básicas rurales menos caras, después de Chiapas, Coahuila y Querétaro.
Por su parte, Alfredo Cuecuecha Mendoza investigador del CIIE-UPAEP, externó que en estos momentos en que se está dando una recuperación económica de manera paulatina en todo el mundo, después de los problemas que ocasionó la pandemia de salud, los productores al establecer algunos precios, estén intentando recuperar en algún momento lo que perdieron durante el año de pandemia y es lo que está provocando una fuerte presión a nivel internacional, aunque existen estudios que demuestran que pueden haber otras tendencias como es el cambio tecnológico mediante el cual se busca sustituir el uso de combustibles fósiles por el uso de las energías limpias y provoque un incremento en el costo promedio del sector industrial y eventualmente generar un incremento en los precios de manera importante.
Por último, los académicos señalaron que los gobiernos tanto estatal como federal, más allá de las cuestiones políticas, puedan ayudar a las microempresas, pequeñas y medianas empresas a sobrevivir, porque no solo proveen la competencia para darle disciplina a los precios, sino que además generan una gran cantidad de empleos y por consecuencia existan medidas, programas, políticas públicas, que ayuden a estas empresas a enfrentar estos periodos tan complicados que se están viviendo por la pandemia y que se verá reflejado en el bienestar de la sociedad y de las familias mismas.