- Es prioritario que las empresas cuenten con este beneficio que garantice el compromiso y bienestar de los colaboradores.
RedFinanciera
En los últimos años las prioridades de las empresas en México a la hora de atraer talento humano se ha transformado como nunca antes. Y es que existe un elemento clave en el mercado laboral que las nuevas generaciones de colaboradores valoran de la misma manera o, en algunas ocasiones, un poco más que la remuneración económica que ofrece el empleador: el salario emocional.
“En este contexto marcado por una alta rotación y la dificultad por atraer a los colaboradores más adecuados para cubrir las nuevas vacantes, el salario emocional se posiciona como una excelente estrategia para destacar en esa fuerte competencia por captar al mejor talento”, explica Haydeé Jaime, Marketing Communications Specialist de Pandapé.
¿Qué es el salario emocional?
Podemos definir al salario emocional como un conjunto de beneficios, más allá de los puramente económicos, que hacen sentirse cómodos a los equipos de una compañía. Estos contribuyen a mejorar su calidad de vida, bienestar, e impactan positivamente en su percepción de ser apreciado, lo que a su vez impulsa su desempeño y, por ende, los resultados del negocio, grande o pequeño.
Algunos datos duros reflejan este cambio de paradigma laboral. De acuerdo con dicha plataforma de reclutamiento y gestión de talento los factores más importantes para que los candidatos acepten un empleo ―incluso por encima del sueldo ofertado― se encuentran el ambiente laboral (27%), las oportunidades de desarrollo profesional (41%) y por supuesto el tan anhelado balance entre trabajo y vida personal (35%)
Salario emocional: ¿cómo implementarlo?
Es por lo anterior que las empresas deben comprender que para atraer a los candidatos más adecuados, deben comenzar por atender estas necesidades. Así, implementar una política de salario emocional y contribuir en la felicidad laboral de los colaboradores requiere de una visión estratégica y herramientas que permitan una mejor toma de decisiones.
Ahora bien, entre los principales componentes del salario emocional (que las compañías deben ofrecer para crear un entorno laboral más confortable), se encuentran:
Horarios flexibles.
Conciliación entre vida personal y laboral.
Clima laboral y cultura de empresa.
Oportunidades de desarrollo de habilidades y conocimientos.
Reconocimiento de logros y compensaciones, donde la visibilidad es determinante.
“Si bien en momentos de incertidumbre económica como los que atravesamos actualmente, recibir un buen sueldo es imprescindible, tampoco es suficiente para garantizar el compromiso y bienestar de los colaboradores en el trabajo, ya que para las nuevas generaciones empieza a cobrar mayor peso aquellos factores que además de dar sentido y propósito a su labor, fortalece su compromiso con la empresa, gracias al sentimiento de plenitud y felicidad que experimentan. Al implementar una estrategia de captación de talento con salario emocional se busca fidelizar al equipo y reconocer que la satisfacción está directamente relacionada con la productividad, lo cual, hoy más que nunca, es determinante”, concluye Haydée Jaime.