- Suspendido en medio de una grave crisis institucional en la isla
RedFinancieraMX
El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, convocó para el próximo 7 de noviembre al Parlamento, suspendido en medio de una grave crisis institucional en la isla después de que fuera nombrado por sorpresa como nuevo primer ministro el exmandatario Mahinda Rajapaksa.
“El presidente me ha llamado por teléfono y me ha dicho que convocará al Parlamento el 7 de noviembre”, anunció este viernes su portavoz, Karu Jayasuriya.
Sirisena nombró a Mahinda Rajapaksa primer ministro después de cesar a Ranil Wickremesinghe, que ha señalado que su cese es inconstitucional y ha exigido que se le permita demostrar su mayoría parlamentaria.
El mandatario no sólo nombró al antiguo presidente como premier sino suspendió el parlamento hasta el 16 de noviembre pero una fuerte presión nacional e internacional obligó al gobernante a adelantar la fecha de la reapertura del congreso local.
El ahora exprimer ministro Ranil Wickremesinghe, quien afirma que sigue al frente del cargo hasta que lo sustituya el parlamento, busca que se reanunden de inmediato las sesiones para no perder el apoyo de los partidos de la coalición en el poder.
Los críticos dijeron que la destitución de Wickremesinghe fue la primera transferencia ilegal de poder desde que Sri Lanka estableció una democracia electoral en 1931.
Citando las enmiendas constitucionales aprobadas en 2015, argumentaron que el presidente no tiene la autoridad para despedir a un primer ministro.
Sirisena despidió el pasado 26 de octubre al primer ministro Wickremesinghe y nombró a su reemplazo en el cargo al exmandatario Rajapaksa, un controvertido líder populista, acusado de crímenes de guerra, y que el propio ahora presidente había derrotado en las elecciones de 2015.
Aún así, muchos esperaban que Sirisena resistiera la creciente presión local e internacional y se apegara a su plan aparente para darle tiempo a Rajapaksa para que se reuniera en la legislatura de 225 miembros.
Es por eso que Wickremesinghe, quien sostiene que él comanda la mayoría en la Cámara y ha estado pidiendo una votación parlamentaria de inmediato antes de perder su apoyo en el congreso.
El enfrentamiento político, que llega en un momento de debilitamiento de la economía en Sri Lanka, viene precedido por varios meses de disputas internas en el seno de la coalición gubernamental.
Las relaciones entre el Partido de Unidad Nacional (PUN), liderado por Wickremesinghe, y la Alianza Unidad para la Libertad del Pueblo (AULP), encabezado por Sirisena, se han visto perjudicadas por no haber sido investigado a fondo un complot de asesinato contra el mandatario.