- Se hizo famoso en la TV al lado de Eugenio Derbez
RedFinanciera
El actor Sammy Pérez Reyes, quien se hizo famoso en las serie de televisión de Eugenio Ferbez por su manera de hablar, falleció este viernes como consecuencia de un infarto cardiovascular, tras unas semanas de luchar contra la covid-19.
En días recientes había sido hospitalizado de emergencia por COVID-19, y aunque hace una semana familiares notificaron a medios de comunicación que el actor se encontraba mejor de salud, la madrugada de este viernes se comunicó la infausta noticia a través de su cuenta de Instagram.
“En la madrugada de hoy a las 3:50 am, Sammy Pérez acaba de sufrir un infarto cardiovascular, su corazónsito a dejado de latir, intentaron hacerle maniobras para salvar su vida pero no pudieron. Descansa en paz, Sammy Pérez. Nos dejas con un vacío muy grande en el corazón.”, se publicó en su cuenta.
El actor, que descubriera Jorge “El Burro” Van Rankin, presentó a lo largo de su hopitalización problemas renales debido a que era diabético.
Fue intubado el pasado 19 de julio al ya tener problemas de respiración y es que sus pulmones se encontraban ya dañados.
Su representante, Erick de Anda descartó que Sammy tuviera el llamado hongo negro, el cual produce la variante Delta del coronavirus.
Sammy nació en Guanajuato y desde muy joven, junto a su familia y hermanos, llegó a la Ciudad de México, donde creció en barrios como el de Tepito y ejerció varios trabajos para apoyar a su familia: fue cerillo en supermercados, ayudante de albañil, de carpintero, de mecánico, hasta que epezó a trabajar en “El Calabozo” con “El Burro” Van Rankin y Esteban Arce en 1997.
En redes sociales, Eugenio Derbez recordó una de las escenas de No se aceptan devoluciones en donde Sammy Pérez habló de la muerte.
Y detalló: “Por la mañana mi equipo de redes me estaba mandando un video de No se aceptan devoluciones en donde precisamente Sammy habla de la muerte. Me dio mucha tristeza y alegría a la vez porque es una escena hermosa. Sammy brillaba en donde lo pusieran. Era un alma buena. Era un ser de luz”.