- El gasto público creció a un ritmo tres veces superior al de los ingresos
- El concepto más amplio de deuda suma 16.7 billones de pesos a septiembre
- Por Gerardo Flores Ledesma
RedFinanciera
El sector empresarial nacional advirtió que la debilidad en las finanzas públicas debido a menores fuentes de recursos, obligara al gobierno de Claudia Sheinbaum a contratar más deuda hasta para pagar los intereses de la misma.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) considera que el gasto público creció a un ritmo tres veces superior al de los ingresos y que uno de los principales retos del nuevo gobierno será fortalecer las fuentes de ingresos y eficientar la asignación de los recursos.
En su más reciente análisis, el CEESP cuestiona a la Secretaría de Hacienda que en su Informe sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública al tercer trimestre de 2024 indica que los resultados mostraron “mejores balances fiscales respecto a lo programado como resultado de la conducción responsable de las finanzas públicas, en un contexto donde la deuda como porcentaje del PIB se mantuvo estable”. Y lo hace, porque México muestra cierta debilidad en las fuentes de recursos.
Agrega que si bien en el periodo enero-septiembre los ingresos totales crecieron 3.3% en términos reales, el gasto aumentó a un ritmo tres veces superior.
Detalla que el mayor impulso provino de los ingresos no petroleros que aumentaron 5.0%, impulsados principalmente por el alza de 5.3% en los ingresos tributarios, toda vez que los no tributarios disminuyeron 0.7%. En el caso de los ingresos petroleros, se observó una baja de 6.1%.
Resalta que el gasto público registró un incremento de 9.1%, en donde el aumento de 16.6% fue en inversión física, aunque se debe tener en consideración que este avance aún refleja el gasto del último año del sexenio de López Obrador como resultado de la terminación de los proyectos insignia de su gobierno.
El gasto en servicios personales y pensiones y jubilaciones, que son los rubros de mayor erogación de recursos aumentaron 7.3% y 5.1%, respectivamente.
El costo financiero aumentó 7.1%, avance inferior al del mismo periodo de los dos años previos. Sin embargo, con este resultado, en términos absolutos sumó 851 mil millones de pesos, la cifra históricamente más alta. Como porcentaje de los ingresos representó el 15.1%, su nivel más alto en los últimos 23 años.
El Boletín de la SHCP presume que los “principales balances fiscales mostraron resultados favorables con respecto a lo programado. El balance presupuestario registró un menor déficit en 56 mil millones de pesos respecto a lo previsto, mientras que el déficit primario presupuestario fue menor que lo programado en mil millones de pesos”.
Pero, dice el CEESP, el déficit presupuestal ya supera el billón de pesos, mientras que el primario fue negativo en 203 mil millones, lo que significa su primera cifra negativa para el lapso enero-septiembre en los últimos nueve años, de tal manera que el gobierno tendrá que endeudarse hasta para pagar los intereses.
Esto propició que los niveles de endeudamiento se elevaran notoriamente. El total de requerimientos financieros del sector público, que de acuerdo con la definición oficial “miden las necesidades de financiamiento para alcanzar los objetivos de las políticas públicas, tanto de las entidades adscritas al sector público como de las entidades del sector privado y social que actúan por cuenta del gobierno” sumaron 1.3 billones de pesos, 42.6% en términos reales más que un año antes.
De esta manera, el saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público, que es el concepto más amplio de deuda, sumó 16.7 billones de pesos a septiembre, 2.2 billones más que el monto reportado el mismo mes del año pasado y 6.5 billones por arriba del saldo de septiembre de 2018. Como referencia, se tiene que de septiembre del 2012 al mismo mes de 2018 el aumento fue de 4.6 billones.