- Hay presiones inflacionarias en EU y se anticipa una alza en los réditos
- Por Ricardo Jiménez
RedFinanciera
El peso mexicano tendrá que lidiar en las próximas semanas con la sombra de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, luego de reconocer que existen presiones inflacionarias, y una forma de mitigar los incrementos en los precios es subir su tasa de interés de referencia.
El tipo de cambio peso-dólar comenzó a presionarse, bajo este nuevo escenario, por lo que, probablemente continúen los movimientos alcistas con amplias probabilidades de mostrar cotizaciones cercanas a los 21 pesos por dólar, además de encontrar un nuevo rango de negociación que fluctuaría entre 20 y 21 pesos por billete verde.
La tasa de interés de referencia de Estados Unidos actualmente se encuentra en un rango de 0 a 0.25%. La mayoría de los analistas del mercado de cambios estiman que la Reserva Federal podría incrementar su tasa de interés en el último trimestre de este 2021, existe el pronóstico de aumentarla en 0.25 puntos porcentuales.
En un principio, los dirigentes de la Reserva Federal no querían reconocer las presiones inflacionarias cuando la inflación de 1.7% saltó a 2.5%, posteriormente se alcanzó un nivel de 4% y actualmente registra un dato de alrededor del 5%, nivel que no se veía desde la crisis financiera-económica de 2009.
El movimiento al alza del dólar estadounidense registrada a finales de la semana previa, se derivó básicamente por la publicación en Estados Unidos de la inflación de mayo que se ubicó en 5%, mientras que la inflación subyacente se ubicó en 3.8%, su mayor nivel desde abril de 1992.
El dólar estadounidense se fortaleció en el mercado de divisas internacional bajo la expectativa de que la Reserva Federal podría adoptar una postura menos flexible en los próximos meses.
En el anuncio de política monetaria del miércoles pasado se destacó un ajuste al alza de las previsiones de crecimiento para 2021 de 6.5 a 7.0%, mientras que la previsión de inflación para este año fue revisada de 2.4% a 3.4%, siendo el cuarto incremento consecutivo de las expectativas de inflación para este 2021.
La percepción de presiones inflacionarias envía la señal al mercado de que los aumentos en los precios podrían no ser transitorios al grado que lo había señalado la Reserva Federal en la mayor parte de este año.
El presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard comentó que podría ser apropiado que la Reserva Federal comience a subir la tasa de interés el próximo año, de acuerdo con las proyecciones de inflación que se ubican por arriba del objetivo del 2.0%. Al igual que Bullard, es probable que otros miembros del Comité Federal de Mercado Abierto muestren un lenguaje menos flexible sobre el futuro de la política monetaria.
El peso mexicano finalizó la semana anterior con una depreciación acumulada de 3.56%, equivalente a una pérdida de 70.7 centavos para ubicarse en niveles de 20.58 pesos, siendo su mayor caída desde la semana concluida el 25 de septiembre de 2020.
El tipo de cambio tocó una cotización mínima de 19.8388 pesos y un precio máximo de 20.7488 pesos por dólar, nivel no visto desde el 29 de marzo. Es importante mencionar que la moneda mexicana acumula seis sesiones consecutivas de depreciaciones frente a la divisa estadounidense.
El peso mexicano seguirá desarrollándose dentro de un ambiente de movimientos volátiles, aunque habría que estar atentos al anuncio de datos económicos sobresalientes principalmente en Estados Unidos como la notificación del Índice PMI Markit servicios a junio, con el pronóstico de ubicarse en 69.8 puntos, y el ingreso y gasto personal.
En la parte interna, se realizará el anuncio de política monetaria del Banco de México (Banxico), donde previsiblemente no habría cambios en la tasa de interés que actualmente se encuentra en 4%, además, se publicará el dato de precios al consumidor correspondiente a la primera quincena de junio, estimada en 0.28% y en términos anuales se ubicaría en 5.99%.