- Cabal y Farah, segunda pareja de un mismo país Latinoamericano que consigue el título
- Por Mauro Flores Ledesma
RedFinancieraMX
A propósito del triunfo que el fin de semana obtuvieron los tenistas colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah sobre la dupla integrada por el español Marcel Granollers y el argentino Horacio Zeballos por 6-4 y 7-5, que los convirtió en campeones del US Open, su segundo Grand Slam en su vida jugando como pareja, después de Wimbledon, y que los coloca actualmente como los número uno del mundo en esta modalidad, es preciso recordar la proeza del tenis mexicano hace 57 años, cuando la pareja de Rafael “Pelón” Osuna y Antonio Palafox conquistó la misma corona en 1962 al superar 6-4, 10-12, 1-6, 9-7, 6-3 a los estadounidenses Chuck McKinley y Dennis Ralston.
El triunfo de Cabal y Farah llenó de regocijo a todos por ser una pareja auténticamente latinoamericana y, en este caso, netamente colombiana. Sin duda una historia sorprendente la de estos tenistas que comenzaron a jugador juntos desde épocas juveniles y que hoy son el orgullo del pueblo colombiano, además de María Camila Osorio quien se adjudicó el título en singles juvenil. Ese mismo orgullo sentimos los mexicanos al recordar el triunfo de nuestros compatriotas Rafael Osuna y Antonio Palafox.
PRIMERA VEZ EN LA HISTORIA
El lunes 27 de agosto de 1962, Dick Dew, corresponsal de la agencia UPI (United Press International), lo narró así: “Tras durísimo match que requirió un total de 64 games, los notables raquetistas mexicanos Rafael Osuna y Antonio Palafox dominaron por segunda vez en un mes a la mejor pareja de dobles de Estados Unidos, Chuck McKinley y Dennis Ralston, conquistando así el Campeonato Nacional de Estados Unidos. Es la primera vez en los 82 años de este torneo que una pareja mexicana se corona”.
Rafael Osuna y Antonio Palafox venían de ganar en semifinales a los sudafricanos Gordon Forbes y Clyff Drysdale por 12-10, 11-9 y 11-9, mientras McKinley y Ralston dejaron en el camino a los yugoslavos Boro Jovanovic Nicola Pilic por 4-6, 6-2, 6-1, 7-5.
CRÓNICA DE PALAFOX
Elenita Osuna de Belmar en su libro “Rafael Osuna Sonata en Set Mayor”, nos ilustra con la crónica que le hizo Antonio Palafox: “Estábamos nuevamente en la final e igual que el año anterior, nuestro contrarios serían los norteamericanos Chuch McKinley y Dennis Ralston que habían derrotado en semifinales a los yugoslavos Boro Jovanovic y Nicola Pilic… Siendo este encuentro muy comentado por los enfrentamientos de Ralston tanto con el público como con los jueces y que más tarde le costaría una suspensión en el siguiente torneo de Forest Hills.
“Al empezar los partidos dejaba solo a Rafael unos minutos para que se concentrara, después respirando hondamente entrabamos a la cancha central. A Ralston y McKinley les habíamos ganado en dos ocasiones, las dos en Copa Davis y ellos una: la final de este mismo torneo el año anterior. Todos los encuentros habían sido a cinco sets y éste no fue la excepción, tuvimos que batallar durante más de tres horas para llegar finalmente al quinto set.
“El primer set lo ganamos 6-4, con un solo rompimiento. El segundo jugamos 22 juegos y nos lo ganaron 12-10, Cuando un set se va a extra games, es imprescindible ganarlo pues casi casi representa el triunfo del partido, pero el set fue para los contrarios. El tercer set lo perdimos fácilmente 6-1. El cuarto fue una batalla a muerte, nos fuimos hasta siete iguales y logramos romper el servicio de Chuck y rescatar el cuatro set por 9-7. El octavo juego del quinto set fue definitivo; estando Ralston al servicio éste fue particularmente largo y las ventajas iban de un lado para otro sin ninguno lograr adjudicarse en definitiva el juego. En un acalorado punto, estando los cuatro en la red, logré echar un globo que parecía salir de la mesa, los cuatro como estatuas observamos el trayecto de la pelota la cual finalmente fue a caer justo en el ángulo de la cancha, con gran alborozo de nuestra parte. El siguiente juego era mi turno al servicio y el saber que Rafael estaría en la red “como un demonio” me daba confianza enorme. Finalmente, después de 64 juegos logramos conquistar el set y el match. ¡Habíamos ganado el Campeonato Nacional de los Estados Unidos!”.
HISTORIA DE ENSUEÑO
Hablar de Rafael Osuna es enaltecer la época más brillante del tenis mexicano ya que sin duda es la máxima glorias de nuestro país en la historia. Sus logros son aquí aún ambicionados, pero nadie lo ha podido igualar.
En 1960 Rafael Osuna se adjudicó el título de dobles en Wimbledon haciendo pareja con Dennis Ralston, quien fue su compañero en la Universidad del Sur de California; en 1961 llegó a la final del US Open haciendo pareja con Antonio Palafox y cayeron por 3-6, 4-6, 6-2, 11-13 ante la dupla de McKinley y Ralston.
La pareja mexicana obtuvo el título de dobles en 1962 al vencer a esa misma pareja y cayó en la final en 1963 ante Ralston y McKinley en otro gran duelo por 7-9, 6-4, 7-5, 3-6, 9-11.
La dupla mexicana conquistó nuevamente la corona de dobles durante el Torneo de Wimbledon en 1963 y semanas después el “Pelón” Osuna conquistó -el 8 de septiembre- el título de singles del US Open al superar a Frank Froehling por 7-5, 6-4, 6-2 y conquistó el número uno en el ranking mundial.
Rafael Osuna forjó una época dorada cuando encabezó el equipo mexicano de Copa Davis que llegó a la final del Grupo Mundial en 1962, al lado de Antonio Palafox, Mario Llamas y Francisco Contreras (capitán-jugador).
Fue múltiple medallista en los Juegos Olímpicos de 1968 cuando el tenis fue considerado como deporte de exhibición y deporte de demostración.
Por estos y muchos otros logros es grato recordar la historia de Rafael Osuna, quien el próximo año será llevado a la pantalla grande y cuyos méritos son recordados por todas las leyendas con las que compartió su vida en las canchas, incluido Rod Laver y Roy Emerson.
GRACIAS A COLSANITAS
Tanto Juan Sebastián Cabal como Robert Farah y la todavía juvenil María Camila Osorio, reconocen que el éxito del tenis colombiano se debe a la apuesta que hace algunos años hizo en el tenis de ese país la compañía de medicina prepagada Colsanitas –empresa que nació en 1980- al que apoyo con recursos económicos, logísticos y de infraestructura para desarrollar e impulsar el tenis en ese país.
Después de ganar el US Open, Robert Farah expuso: “Esto comenzó como un sueño para nosotros del equipo Colsanitas y una persona muy especial, Roberto Cocheteux, que falleció hace unos días. No pudimos ir a su sepelio por estar aquí, pero dijimos que si lo ganábamos se lo íbamos a dedicar a él y no hay mejor manera de homenajearlo que dedicarle este triunfo”.
URGE APOYO DE LA IP
México es un país con mayor talento tenístico, recursos e infraestructura que muchos otros países de Latinoamérica, sin embargo hace cuatro décadas que estamos sumergidos en un abismo a causa, entre otros, de los malos dirigentes. Es el momento que alguna empresa mexicana asuma el compromiso para desarrollar al tenis mexicano porque los que dicen dirigir al tenis desde entonces solo han sido petardos de a peso. El cambio es necesario y urgente.