- ¿A qué el miedo?
- Por Armando rojas Arévalo
RedFinancieraMX
PAULINA: Dice la sabia conseja mexicana que (antes de transcribirla, pido me disculpen): “Cuando al diablo le pierden el miedo y el respeto, chingó a su madre el diablo”.
LÓPEZ OBRADOR no quiere iniciar demandas e investigaciones de ex funcionarios, por cualquiera de estas dos razones: Miedo a los capos de la política y el narco o porque así lo pactó con PEÑA NIETO. La persecución a EMILIO LOZOYA y la detención del empresario ALONSO ANCIRA, ha sido por una averiguación y demanda por la compra-venta fraudulenta de la empresa chatarra Agro Nitrogenados en agravio de Pemex que viene del sexenio pasado. En consecuencia, no es AMLO el que inició la investigación.
Está visto que LÓPEZ OBRADOR no quiere líos, pero, finalmente tendrá que actuar en contra de los corruptos, obligado por las circunstancias. Para el excandidato a la Presidencia, FRANCISCO LABASTIDA OCHOA, ninguna persona está por encima de la ley, por lo que cualquier funcionario público que haya incurrido en actos de corrupción durante los sexenios pasados debe ser investigado, y de ser encontrado culpable, ir a prisión, dijo hoy en entrevista con ARISTEGUI.
“Tienes que meter a la cárcel a todos los que hayan violado la ley. No hay excepciones” fue el mensaje de LABASTIDA a LÓPEZ OBRADOR.
POR OTRO LADO, anteayer, la directora del CONACyT, MARÍA ELENA ALVAREZ-BUYLLA, respondió con voz temblorosa cuando le preguntaron si era cierto que el organismo que dirige tiene un comedor privado de lujo para sus directivos, que dicho comedor ”es una conquista laboral” de los empleados. La verdad es que, efectivamente, el anterior director del CONACYT, ENRIQUE CABRERO, tenía un comedor privado con chef y nutriólogo de planta que le cocinaban a capricho.
No entiendo por qué la nueva directora del CONACYT protege a su antecesor, a sabiendas de que los golpes en la prensa salen de funcionarios que vienen del pasado y siguen incrustados en puestos de medio mando y que, al igual que su antiguo jefe, ENRIQUE CABRERO, protegen a MONSANTO en las investigaciones de la línea de alimentos transgénicos.
La ALVAREZ BULLYA es una prestigiada investigadora mexicana que públicamente se ha opuesto a los transgénicos, pero se ha encontrado que al interior del CONACYT hay quienes están a favor de ellos, por cierto elaborados por Monsanto que lleva más de un siglo envenenando el planeta. El llamado gigante de la biotecnología Monsanto es uno de los líderes mundiales en cultivos y semillas modificadas genéticamente, y, en consecuencia, es una de las compañías más odiadas del mundo debido a las numerosas denuncias sobre los perjuicios para la salud y las consecuencias negativas para el medio ambiente que conlleva la modificación genética de los alimentos.
Hoy en día el nombre de Monsanto se asocia principalmente con los organismos modificados genéticamente (OMG), pero en sus 113 años de existencia, la empresa ha trabajado en esferas muy diferentes, produciendo desde plástico hasta el agente naranja. Los efectos de este trabajo siguen sintiéndose en todo el mundo y en algunos casos la ciencia ya ha demostrado que tienen consecuencias extremadamente dañinas en el medio ambiente y la salud humana.
La señora ALVAREZ BUYLLA no dijo la verdad, por miedo a revolver más las aguas o miedo a represalias. A qué le tiene miedo? Si le tiemblan las corvas, mejor que renuncie.
HACE UNOS DÍAS las redes sociales y la televisión nos hicieron testigos de la afrenta al Ejército Mexicano en La Huacana, Michoacán, donde autodefensas detuvieron y humillaron a soldados para obligar a sus jefes –lo cual ocurrió- a devolver el armamento que los soldados les habían incautado, entre ellas una ametralladora Barret, conocida como “tirahelicópteros”. Los soldados fueron escupidos, golpeados, insultados y vejados, y el que iba a cargo del grupo fue obligado a hablar con su superior para decirle que los autodefensas pedían a cambio de su libertad la devolución del armamento.
El Presidente de la República elogió la actitud de los soldados, mientras que la secretaría de la Defensa justificó el desarme que sufrieron sus soldados justificando que el procedimiento evitó un derramamiento de sangre.
Perdona: ¡¡Son chingaderas!! Yo no soy soldado; es más, no tuve, parafraseando a LEÓN FELIPE, un mi abuelo que fuera general y ganara una batalla, ni estudié en escuela militarizada. Sin embargo, el Ejército me parece una institución respetable que ha estado siempre al lado del pueblo y merece respeto. Es, como dice AMLO, el pueblo con uniforme.
Si le faltan el respeto, si lo agreden, si lo humillan, si lo vapulean, si se burlan de él, vale madres. Así, directo.
LÁASTIMA MARGARITO! Otro cargo que se le fue a MANUEL VELASCO COELLO es el de director de CAPUFE, la caja chica del Presidente. AMLO nombró a GENARO ENRIQUE UTRILLA en sustitución de BENITO NEME SASTRÉ; por cierto, chiapaneco, originario de Tuxtla Gutiérrez. Ingeniero civil egresado de la facultad de Ingeniería de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, con estudios de especialización en Administración de Obra, Sistemas de Planeación y Alta Dirección. Con más de treinta años de experiencia tanto en el ramo de la construcción, como en el de mantenimiento, rehabilitación y operación de carreteras, ha dirigido y participado en obras en las más importantes autopistas del país como la México-Querétaro; México-Puebla; Mazatlán-Durango; Tecate-Tijuana; Autopista Lerma-Tres Marías y Morelia-Salamanca, entre otras. Disculpa, no lo conocía ni sabía de su existencia.
En SU COLUMNA “Tertulia PolÍtica”, el periodista morelense PEDRO MARTÍNEZ SERRANO devela con base en un trabajo elaborado por el Centro de Investigación Morelos Rinde Cuenta, que El Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC) se encuentra en riesgo de colapso operativo y financiero. Distintos datos muestran cómo el desempeño y las finanzas de la institución se deterioran a gran velocidad, la gobernabilidad interna se debilita y la inconformidad ciudadana se incrementa.
(Esto es mío): Todo Cuernavaca está mojado, no por las lluvias, sino por las fugas en la red. Por ejemplo, hace casi dos años me quejé de un fuga afuera de mi casa y hasta el momento el agua fluye como si hubiera un manantial.