- Mercados bursátiles esperan otra semana con bajas y salida de capitales en renta variable
- Se anticipa el aumento de los niveles de inflación a más del 7%
RedFinanciera
Los comentarios de los timoneles de la Reserva Federal, Jerome Powell, y del Banco Central Europea (BCE), Christine Lagarde, sobre un alza en las tasas de interés en Estados Unidos de más del 3% para este año y de 0.8% en los países europeos, atizaron los temores de una recesión en el planeta y provocaron fuga de capitales.
Las palabras de Powell, aparentemente inocuas, acerca de que las tasas de interés debían aumentarse “un poco más rápido” provocaron una caída en los mercados de valores del mundo y una salida de fondos de inversión en renta variable en EU, que sumó más de 16 mil 500 millones de dólares, algo no visto desde diciembre pasado.
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Lagarde, fue más diplomática, pero también se está moviendo claramente en la misma dirección de endurecimiento.
Expertos financieros consideran que esta semana podrían extenderse las pérdidas, y deja en claro que los banqueros centrales están influyendo por ahora en los mercados de valores globales, lo cual es un cambio dramático en las expectativas en comparación con hace solo unos meses.
Los análisis financieros con previsiones para corto plazo detallan que los bancos centrales se apresuran a ponerse al día con el aumento de los niveles de inflación a más del 7% en ambos lados del Atlántico.
Se aclara que las valuaciones de acciones son el valor actual de todas las utilidades de la empresa en el futuro. Cuanto más altas sean las tasas de interés, menor será este valor.
Lo anterior ha provocado que, al momento, el valor de los mercados accionarios se haya abaratado, y que los portafolios de inversión busquen refugios relativamente más seguros para estos temores de tasas de interés más altas.
Aunque los mercados se mantienen estresados, los analistas consideran que EU está cerca de su “inflación máxima”, aunque pesa en el ánimo la disminución del crecimiento económico y una caída de los precios del petróleo y los automóviles.
Asimismo, se prevé que estamos cerca del pico del “miedo de la Fed”, y que los mercados esperan una serie de aumentos de la tasa de interés que ronde el 0.5%, cada una, en las próximas tres reuniones
Riesgos de recesión en contexto
El FMI recortó su pronóstico de crecimiento del PIB real mundial para este año del 4.4% al 3.6%, debido a los impactos de la guerra de Ucrania (-35% del PIB) y la mayor inflación (5% en el mundo desarrollado). Se prevé una tasa de crecimiento mundial similar del 3.6 % en 2023.
Reino Unido y Europa lideraron los recortes previstos, con los exportadores de materias primas Canadá y Brasil resistentes a la baja.
Aunque es evidente el fuerte recorte en la economía mundial y que las tasas de interés toman sendas inusitadas, algunos analistas creen que los temores de una recesión esta amortiguada, ya que hay otros indicadores, desde el comercio hasta la curva de rendimiento, que aún son tranquilizadores.
El indicador de comercio de Kiel muestra que el comercio mundial se está estabilizando después de un primer trimestre débil, aunque con riesgos: el 12% del comercio mundial está estancado en los barcos.
El detalle está en la política monetaria
Sin embargo, estamos en un nuevo mundo de inversión. La revisión de precios aguda e interminable, junto con las expectativas de alza en réditos de la Reserva Federal y la inflación alta durante más tiempo, han generado que la volatilidad de los bonos se más del doble de la observada en el mercado de las acciones, y ha propiciado un índice de condiciones financieras de EU más restrictivo.
Esto impulsa una valuación más baja y una rotación desde acciones de crecimiento a las de valor. Las acciones están siendo sometidas a pruebas de estrés por el aumento de los rendimientos de los bonos. Sin embargo, hay límites respecto de cuán altos pueden llegar a ser los rendimientos.
La Reserva Federal tiene más control sobre los rendimientos ahora con su inminente gran disminución de su hoja de balance, mientras que los altos niveles de deuda y la amplia brecha de rendimiento con los mercados globales funcionan como limitantes.