- Propone hábitos ecológicos la industria textil
- Por Norma L. Vázquez Alanís
RedFinancieraMX
(Segunda de dos partes)
La moda sustentable es la que confecciona ropa con materia prima obtenida de materiales reciclados, para intentar reducir la contaminación de los suelos y los mares, y evitar tanto el uso desmedido de agua en la producción, como las grandes emisiones de gases dañinos a la atmósfera, es decir, esta tendencia implica una responsabilidad social y ambiental en cada instancia de la cadena de producción.
Este nuevo paradigma busca, además, crear conciencia sobre la preferencia innecesaria de los estilos cambiantes, porque con la sustentabilidad en el diseño de indumentaria se pretende erradicar los ciclos lineales de consumo y generar un sistema circular, en el cual nada se pierde y todo se transforma.
Para ello es indispensable que se informe al usuario sobre el origen de los textiles con que está elaborada la ropa, saber de dónde vienen y a dónde van una vez que alguien los desecha, tomando como punto de partida la conciencia de las problemáticas suscitadas alrededor del consumo masivo y sin mesura, de los residuos sólidos textiles y de los desechos de la industria de la moda.
Datos de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad) de 2019 sobre la industria de la moda, revelaron que ésta es la segunda más contaminante del mundo, pues es responsable del 20 por ciento del desperdicio total de agua a escala global, de la producción del ocho por ciento de los gases de efecto invernadero y que cada segundo se entierra o quema una cantidad de textiles equivalente a un camión de basura.
Reutilizar y reciclar fibras textiles
de ropa post consumo
Ante estas alarmantes cifras, algunas marcas importantes de ropa de moda en todo el planeta implementaron ya programas de recogida activa de prendas de vestir usadas en sus tiendas y crean nuevas acciones comerciales a través de ello para beneficio de sus clientes participantes. Por ejemplo, a quien deja su prenda usada en el buzón de recoleta, la marca le entrega un cupón de descuento para su próxima compra.
El objetivo a largo plazo de estas marcas es encontrar una vía para la reutilización y el reciclado de todas las fibras textiles de los productos recogidos posconsumo para generar una nueva fibra textil de calidad, al mezclar fibra textil reciclada con fibra virgen. Actualmente la industria invierte recursos a fin de encontrar la fórmula que permita producir una fibra de alta calidad obtenida cien por ciento a partir de fibra reciclada.
Además, se avanza en el uso de tejidos reciclados producidos a partir de desechos plásticos, que permiten la creación de tejidos a base de fibras como el X2, SaXcell, Returnity y Econyl. Estas nuevas telas se basan en el concepto de regeneración y se producen con materiales de desecho.
Por ejemplo, el Econyl es elaborado con redes de pesca abandonadas en alta mar que son reciclables o reutilizables, lo cual les permite adaptarse a múltiples ciclos de vida y configurar el modelo de círculo cerrado de vida del producto. El Returnity es un tejido de poliéster totalmente reciclable que reemplaza no sólo al poliéster tradicional, sino también al algodón y los tejidos de lana; estos tejidos reducen el impacto de CO2 en un 72 por ciento, la gestión de residuos en un 99 por ciento y el uso de agua en un 93, en comparación con el algodón.
Otra manera de reciclar la ropa usada es el denominado “upcycling”, que se basa en el uso del producto tal cual fue concebido y creado, con mejoría incluso de sus prestaciones iniciales; el resultado final es una prenda de vestir o accesorio único en su tipo y sostenible. Se trata de aprovechar objetos usados para crear nuevos productos con una finalidad distinta a la original, incluso con mayor valor que el que tenía el artículo originalmente, esto es, la transformación de un “desecho” en algo de valor y utilidad, con lo cual se le dota de una segunda vida rentable.
Y por último, existe el reciclado de ropa usada como tal, para lo que se hace una selección de las prendas a través de una búsqueda exhaustiva en diferentes lugares, muy lejanos unos de otros; las prendas son revalorizadas, desinfectadas y adecuadas para reinsertarlas nuevamente en el mercado. El objetivo de esta reutilización, a cargo de colectivos ambientalistas, se basa en promover la conciencia del consumidor sobre el cuidado del medioambiente a través de la promoción del reciclamiento de las prendas, sin la necesidad de consumir nuevas materias primas y recursos naturales. Así se alarga la vida de la ropa y se reduce la contaminación.
Pero, finalmente, depende del comprador cambiar sus patrones de consumo para contribuir a la limpieza del planeta.