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Para los padres, el bienestar de sus hijos e hijas es prioridad, y resulta una preocupación constante el ser capaces de enseñar una especie de guía o brújula interior que los acompañe de por vida, y que les ayude a tomar las mejores decisiones para ser felices, para que sean buenos, y para que puedan desarrollar su máximo potencial; incluyendo un interés consciente por los demás.
Es debido a esto, que es fundamental enseñar a los pequeños el manejo de la energía, ya que si comienzan a edades tempranas no sólo tendrán una vida más equilibrada, consciente y feliz, sino que mejorarán sus capacidades de atención, aprendizaje, y podrán gestionar sus emociones más fácilmente cuando atraviesen por los retos naturales de la vida, por lo que a continuación, Panterita, guía espiritual, habla más del tema y cómo enseñar sobre el manejo de la energía a los niños y niñas en el marco de su celebración anual.
“Además de lo anterior, los niños y niñas que trabajan en su energía se vuelven resilientes, más empáticos con los demás, lo que ayuda a su vez a mejorar las relaciones en esta y otras etapas de la vida, a vivir en el presente, así como a disminuir la ansiedad y el estrés cotidiano, sobre todo si nuestros pequeños son más propensos a padecerlos”, explicó Panterita, quien comparte cómo los padres pueden comenzar a transmitir la sabiduría del manejo de energía.
– Control de la respiración: La respiración es el ejercicio más básico y también uno de los más poderosos para comenzar a trabajar en el manejo de la energía, ya que ayuda en su regulación consciente y también en el desbloqueo de ésta.
“Después de jugar o hacer algún tipo de actividad física con tu hijo o hija, invítalo a que se siente unos minutos junto a ti y muéstrale cómo respirar profundamente para calmarse; inhalando en tres tiempos, reteniendo en tres tiempos y exhalando en tres tiempos. Háganlo un par de veces y al terminar pregúntale qué sintió. Busca que la experiencia sea lo más relajada y amena posible. Este ejercicio es además la base de la meditación”, indicó Panterita.
– Ejemplo de la madre/padre: Muchos de los aprendizajes que se cargan a lo largo de la vida provienen de los ejemplos del padre y la madre, por eso, en las edades tempranas se dice que los niños y niñas son como “esponjitas”, y por más que se les enseñe algo con palabras, siempre tendrá más impacto el ver su aplicación en la vida real, por lo que la guía espiritual recomienda el que los propios padres implementen en su vida sesiones de meditación, de agradecimiento, y de aprendizaje del manejo de su energía.
– Visualización: “Los niños son muy buenos en la visualización por la gran energía creativa que poseen, por lo que se puede utilizar esta capacidad para la transmutación de energía. Si tu pequeño o pequeña está triste o enojado/a, pídele que te acompañe unos momentos y que te explique con sus palabras qué siente, en qué parte del cuerpo lo siente y cómo imagina que esta energía se ve dentro de él o de ella.
Luego, pídele que cierre los ojos, y que siga tu voz. Dile que haga un par de respiraciones y después que visualice cómo esa energía se convierte en otra llena de luz o morada. Al terminar pregúntale cómo se siente y cómo lo visualizó”, recomendó Panterita.
– Mostrar los chakras: Los chakras son los grandes centros energéticos de cada ser, por lo que enseñar sobre las áreas que rige cada uno es esencial para evitar bloqueos, o bien para detectarlos. “Puedes acceder a mi curso para obtener más información del tema, y al mismo tiempo, enseñarle a los pequeños por medio del dibujo. Busca que tus explicaciones sean directas y sencillas e investiguen juntos o juntas si surgen dudas”, indicó la guía espiritual.
– Ejercicio de los sentidos: Esta es una práctica común y poderosa del mindfulness, o conciencia plena, y para muchos niños resulta muy entretenida, sin mencionar que como se explicaba arriba, ayuda mucho a mejorar la concentración. Consiste en encontrar un sitio de la casa, del jardín o un parque (de preferencia), en donde ambos se sienten y presten atención a sus sentidos. “Pregúntale qué siente con sus manos, qué huele, qué ve y qué escucha y dediquen algunos momentos a disfrutar de estas sensaciones, que conectan directamente con el presente.
Finalmente, otros ejercicios que pueden realizar para empezar a trabajar con la energía es colorear mandalas, escuchar música con mantras que después pueden pronunciar, así como crear sus propias afirmaciones de confianza y protección, esto no sólo reforzará su lazo, sino que iniciará la llama espiritual dentro de él o ella que lo/la acompañará de por vida. Recuerda tener mucha paciencia y no forzar ningún tipo de conocimiento o ejercicio; trata poco a poco; ¡bendiciones de amor, luz y energía divina!”, compartió por último Panterita.