- Por Juan José Li Ng
RedFinanciera
El impuesto propuesto del 3,5% a las remesas en Estados Unidos aumentaría el costo de enviar 350 dólares de 5 a 17,25 dólares, lo que representa un aumento de casi el 250%. Este drástico aumento podría impulsar el crecimiento de múltiples canales informales y no regulados para el envío de remesas.
La estructura del mercado del corredor de remesas entre Estados Unidos y México se asemeja a lo que los economistas describen como un mercado altamente competitivo.
La revolución digital, la globalización del sistema financiero y, sobre todo, el tamaño de este mercado —el corredor de remesas más grande del mundo, con más de 12 millones de migrantes mexicanos y 28 millones de migrantes de segunda y tercera generación— generaron un círculo virtuoso que permitió economías de escala y atrajo a numerosos competidores.
Durante 25 años, la “mano invisible” de Adam Smith ha obrado su magia en el corredor de remesas entre Estados Unidos y México, reduciendo el costo a alrededor de 5 dólares, un nivel que varios expertos creen que será difícil de reducir más, pues ya está cerca del costo operativo del servicio.
Así, una política fiscal que esté destinada principalmente a afectar a la población migrante indocumentada (o simplemente a recaudar ingresos) podría arruinar un mercado de remesas que actualmente es seguro, regulado y altamente competitivo, con precios ya en niveles mínimos y donde los principales beneficiarios son los consumidores.