- El empresario regiomontano murió cuando intentaron secuestrarlo miembros de la Liga Comunista 23 de septiembre
RedFinancieraMX
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) condenó las afirmaciones del director del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), Pedro Salmerón Sanginés, quien calificó de “valientes jóvenes” a quienes asesinaron al empresario Eugenio Garza Sada, y exigió una disculpa pública.
“No es valiente quien busca privar a una persona de su libertad y no es valiente quien planea un secuestro para financiar armamento ilegal para actividades ilícitas”, manifestó el organismo sobre el asesinato de Garza Sada, ocurrido el 17 de septiembre de 1973 durante un intento de secuestro.
Tampoco es “valiente quien asesina a un hombre de bien o quien se escuda en la violencia como vía de cambio”, subrayó la cúpula empresarial dirigida por Carlos Salazar Lomelín.
Señaló que los empresarios coinciden y respaldan al Ejecutivo federal en el sentido de impulsar un proceso de pacificación y reconciliación nacional, pero es “incomprensible que un funcionario público, un representante del gobierno mexicano, enaltezca la violencia como forma de expresión”.
“Es incomprensible que un funcionario, que además es historiador de profesión, se vuelva un apologista de la violencia, un defensor del delito”, insistió el organismo.
“La sociedad se encuentra hoy muy lastimada (y) estas expresiones sólo profundizan las heridas. Por ello, no debemos dejar pasar un episodio como este, que no solo merma la imagen pública de un gobierno comprometido con la pacificación del país, sino que abona al clima de violencia social que hoy vivimos”.
El CCE añadió que el asesinato de Garza Sada fue simple y llanamente un crimen artero y cobarde que terminó con la vida de uno de los empresarios más íntegros que ha tenido el país.
La polémica comenzó el pasado martes, cuando a través de una publicación en Facebook, que ya no fue eliminada, el funcionario habló sobre el intento de secuestro de Eugenio Garza Sada, a quien describió como “uno de los más notables y emprendedores industriales del país”.
Salmerón, mencionó que el empresario de Nuevo Léon, “a pesar de su fortuna, era un hombre modesto y austero” y recordó que fue el fundador del Instituto Tecnológico de Monterrey.
Pero añadió en su escrito: “Su muerte fue resultado de la profunda división que experimentó la sociedad mexicana desde los años sesenta, cuando muchos jóvenes que veían canceladas las posibilidades de participación y transformación pacífica de un sistema político vertical y autoritario, buscaron cambiar las cosas por la vía violenta. En su lucha contra el estado y el sistema capitalista, identificaron a los empresarios nacionales como sus enemigos, de ahí que no fuera nada raro que planearan secuestrar a Garza Sada”.
Y agregó que el empresario había muerto gracias al fuego cruzado desatado en una balacera y llamó “valientes” a los integrantes de la Liga Comunista 23 de Septiembre.
El aserto fue este: “Un comando de valientes jóvenes de la Liga Comunista 23 de Septiembre intentó raptarlo, se desató una balacera en la que perdieron la vida don Eugenio y sus escoltas, Bernardo Chapa y Modesto Hernández, y dos de los guerrilleros”.
Ahí empezó la polémica y ahora los empresarios exigen una disculpa pública por tan lamentables comentarios que provocan división en la sociedad.