- Proporcionaría nuevos datos sobre cómo algunas estrellas terminan sus vidas
RedFinancieraMX
Un grupo de astrónomos confirmó la identidad del púlsar más joven conocido en la Vía Láctea, el resultado proporcionaría nuevos datos sobre cómo algunas estrellas terminan sus vidas.
Los científicos corroboraron, mediante información del Observatorio de rayos X Chandra de la NASA, que el remanente de supernova Kes 75, ubicado a unos 19 mil años luz de la Tierra, contiene el púlsar (estrella de neutrones pequeña que gira a gran velocidad) más joven encontrado hasta ahora en la galaxia.
Debido a su rápida rotación y fuerte campo magnético, se ha generado un viento de materia energética y partículas de antimateria que fluyen hacia el pulso a una velocidad cercana a la de la luz.
Dicho viento de púlsar generó una gran burbuja magnetizada de partículas de alta energía llamada nebulosa del viento de púlsar, la cual se observa como una región azul que rodea al púlsar, detalló la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés).
Una de las imágenes difundidas por la agencia espacial estadunidense, muestra a Kes 75, los rayos X de alta energía un tono azul. Mientras que los rayos X de baja energía aparecen en púrpura.
Los datos de Chandra tomados en 2000, 2006, 2009 y 2016, muestran que el borde exterior de la nebulosa del viento de púlsares se expande a un millón de metros por segundo, o más de dos millones de millas por hora.
La alta velocidad puede ser por la expansión de la nebulosa del viento de púlsar en un entorno de densidad baja, por ello, los astrónomos sugieren que se está expandiendo en una burbuja gaseosa soplada por el níquel radiactivo formado en la explosión y expulsado cuando la estrella explotó.
La tasa de expansión también sugiere que Kes 75 estalló hace unos cinco siglos, visto desde la Tierra. El objeto está a unos 19 mil años luz de distancia, pero los astrónomos se refieren a cuando su luz habría llegado al “planeta azul”.
A diferencia de otros remanentes de supernova de esta era como Tycho y Kepler, no hay registro histórico alguno sobre la explosión que creó Kes 75, esto, debido a la densidad de polvo y gas interestelar existente en la Vía Láctea.
Los resultados publicados en “The Astrophysical Journal” arrojaron que de 2000 a 2016, el brillo de la nebulosa del viento de púlsar disminuyó 10 por ciento en el área norte, con una disminución del 30 por ciento en un nudo brillante.