Centro histórico

0
357
  • La fortuna de 16 mexicanos supera la deuda externa
  • Amenaza de bombas y retórica agresiva: ¿Van de la mano?
  • Donald Trump debería ordenar que invadan México: Ann Coulter
  • ‘Odio’ tras el ataque en la sinagoga: Trump
  • Por Crescencio Cárdenas Ayllón

RedFinancieraMX

No cabe duda de que la locura tiende a contagiarse en algunos casos muy selectos y de acuerdo a consideraciones de especialistas, tal cosa se puede tomar en un caso que llamó la atención por el oportunismo de quien al parecer asumió esa situación clínica que aseguran expertos padece cada vez más evidente el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, cuando una mujer se atrevió a solicitarle que envíe tropas no solamente a la frontera de ese país con México sino que lo invada.

La controvertida escritora conservadora Ann Coulter ha sugerido que el  presidente Donald Trump debería dar la orden de que las tropas estadounidenses invadan México.  En la transmisión del viernes de “The Ingraham Angle” de Fox News, Coulter afirmó a la anfitriona Laura Ingraham que era una opción disponible para Trump para detener a los inmigrantes indocumentados que intentaban ingresar a los EU.  El ejército realmente no puede hacer nada parado de nuestro lado de la frontera.

“¿Qué van a hacer, disparar a los invasores?”. “Pero podrían invadir, podrían ir en diez yardas hacia México (90 metros). No pedimos la aprobación de Irak para entrar; no pedimos la aprobación de Afganistán para entrar “, agregó, en el clip publicado en línea por Media Matters.

Pero hete ahí que para atizar el fuego el presidente de Estados Unidos, Donald Trump denunció este sábado el odio a su país luego de un tiroteo en una sinagoga en Pittsburgh, Pensilvania, donde un hombre mató a varias personas antes de ser detenido. “Es una cosa terrible lo que está sucediendo con el odio en nuestro país, francamente, y en todo el mundo”, dijo Trump a periodistas antes de partir para una serie de eventos de campaña en Indiana e Illinois. “Hay que hacer algo”, añadió.

En Indianápolis, comentó que muchas personas fueron asesinadas, en lo que definitivamente parece un crimen antisemita. “El mundo es violento”, al tiempo que caracterizó al sospechoso del ataque como: “Un hombre loco, desquiciado”. El mandatario dijo estar considerando cancelar sus mítines electorales debido al suceso.

Cuando se le preguntó si era hora de revisar las indulgentes leyes de armas del país, el presidente sugirió que el número de víctimas podría haber sido mucho menor si se hubieran colocado guardias armados en la sinagoga. “Si tuvieran protección dentro del templo, tal vez podría haber sido una situación muy diferente”, enseguida pidió una justicia más rápida y condenas más severas, incluso invocando un mayor uso de la pena de muerte. “Cualquiera que haga algo como esto a personas inocentes en un templo, en una iglesia… realmente debería sufrir ese castigo final”.

Mientras tanto por acá en este lado de la bélica frontera con los vecinos del Norte se dio a conocer que un grupo de 16 mexicanos concentra una riqueza de 141 mil millones de dólares, una cantidad que ha ido en aumento y que para efectos comparativos supera con creces el saldo de la deuda externa del gobierno federal, señaló un reporte independiente e información oficial.

El año pasado la riqueza personal de este pequeño grupo de mexicanos pasó de 116 mil 700 millones a los actuales 141 mil millones de dólares, reveló el informe Billionaries report 2018, elaborado cada año por la banca suiza UBS. El reporte mencionó que en un año la riqueza de este grupo –de los que no cita nombres– aumentó 21.5 por ciento.

Se trata de una tasa de crecimiento que prácticamente multiplica por 10 el desempeño de la actividad económica del país, que en los pasados 12 meses –con cifras actualizadas al segundo trimestre del año– repuntó 2.4 por ciento, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

En términos comparativos, la riqueza de este grupo de mexicanos supera el monto de la deuda externa del gobierno federal, que en agosto pasado, el más reciente dato disponible, fue de 95 mil 943 millones de dólares, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

A su vez, en el listado correspondiente a este año, la revista estadunidense Forbes indicó que 16 mexicanos poseían una fortuna personal superior a mil millones de dólares. Los primeros en ese grupo fueron: Carlos Slim (América Móvil y Grupo Carso), con 67 mil 100 millones de dólares; Germán Larrea (Grupo México), 17 mil 300 millones; Alberto Baillères (Grupo Bal y El Palacio de Hierro), 10 mil 700 millones; Eva Gonda de Rivera (Grupo Femsa), 7 mil 100 millones, y Ricardo Salinas Pliego (Grupo Salinas y TV Azteca), 7 mil 100 millones de dólares.

Por su parte, el reporte de UBS señaló que la mitad de los 16 multimillonarios mexicanos ha hecho su fortuna a partir de negocios emprendidos por ellos mismo y no por herencias. A propósito del reporte de UBS, el diario The Guardian reportó este viernes que los multimillonarios ganaron más dinero el año anterior que en cualquier otro registrado en la historia.

Por otra parte el hallazgo de bombas caseras dirigidas a prominentes figuras demócratas y a la cadena noticiosa CNN hace que aumente el temor a una campaña electoral sacudida por una violencia política desconocida en Estados Unidos y plantea incómodos interrogantes acerca del impacto de la retórica cada vez más corrosiva de los líderes de la nación.

Los fallidos ataques a escasas dos semanas de las elecciones de mitad de término hacen que la gente se replantee muchas cosas y se pregunte si el presidente Donald Trump está azuzando peligrosamente las pasiones. Los demócratas dicen que sus declaraciones parecen justificar la violencia contra periodistas y el que se denigre a los rivales políticos. El mandatario condenó toda violencia política e hizo un llamado a la unidad.

Algunos votantes se muestran preocupados de que el país esté incursionando en terreno desconocido.  “Se siente como si estuviésemos en una guerra civil en la que no hay disparos”, dijo Bobby Dietzel, de 45 años, quien trabaja en tecnología de la información en Kansas City y quien no está registrado con ningún partido. “Casi que da miedo hablar de política con otros”.

Las autoridades policiales no han dado por ahora posibles motivos detrás de la ola de bombas interceptadas el miércoles ni han dicho si pueden responder a cuestiones políticas. Los blancos de estas bombas, en todo caso, han estado todos en la mira de Trump y de la derecha. Los fallidos ataques aumentan la volatilidad de las elecciones de noviembre, que son vistas cada vez más como un referendo sobre los primeros dos tumultuosos años de Trump en la presidencia.

Mucho antes de que se encontraran los explosivos ya había aflorado una retórica incendiaria, sobre todo entre los republicanos, que condenaron a manifestantes que hostigan a legisladores republicanos y a funcionarios del gobierno en restaurantes y otros sitios públicos. Durante la campaña electoral, Trump y otras figuras importantes de ese partido han estado hablando de una “turba” demócrata dispuesta a causar daño físico a sus adversarios.

Pero incluso algunos aliados de Trump dicen que las bombas encontradas el miércoles obligan a hacer una pausa para la reflexión e instaron a Trump a moderar su tono. “Hay que calmarse un poco”, dijo Anthony Scaramucci, prominente partidario de Trump que ocupó brevemente un cargo en la Casa Blanca. Agregó que Trump “tiene que darse cuenta de que debe suavizar su retórica”.

Del otro lado del espectro político, el alcalde de Nueva York Bill de Blasio, un demócrata, exhortó a “todos los funcionarios públicos de todos los partidos” a que “no alienten la violencia”. “No estimulen el odio. No alienten los ataques a la prensa”, dijo. “Y eso tiene que empezar por arriba”.

Hace menos de dos semanas el Comité Nacional Republicano difundió un video titulado “La izquierda: Una turba desquiciada” que muestra a manifestantes liberales golpeando puertas, alentados por una agresiva retórica de prominentes figuras demócratas, como la representante Maxine Waters y Hilary Clinton.

Waters recomendó en junio que se hostigue a los miembros del gabinete de Trump en público, en tanto que Clinton dijo este mes que “no se puede actuar civilizadamente con un partido político que quiere acabar con todas las cosas en las que tú crees, con todo lo que te importa”.

Clinton fue uno de los blancos de las bombas. Las oficinas neoyorquinas de CNN, que es fuertemente criticada por Trump y sus partidarios, fueron evacuadas al recibirse un aparato explosivo y un sobre con un polvo blanco. El presidente de CNN dijo en un comunicado que la Casa Blanca “no entiende en absoluto la gravedad de sus continuos ataques a la prensa”.

Trump lanzó un mensaje conciliatorio en una presentación en Wisconsin el miércoles. “Hay una sola manera de resolver” las cosas, sostuvo. “Pacíficamente, a través de las urnas”. Posteriormente describió a la senadora Tammy Baldwin como una socialista “radical de extrema izquierda” y dijo que “nuestro país está siendo agredido” por una caravana de miles de migrantes centroamericanos. La caravana estaba a unos 1.600 kilómetros de Estados Unidos (1.000 millas).

A lo largo de toda su carrera política Trump ha empleado ataques muy personales y provocativos contra sus adversarios. Durante la campaña presidencial exhortó reiteradamente a sus partidarios a atacar físicamente a manifestantes liberales, ofreciendo incluso pagar por sus abogados si llegasen a necesitarlos. Con frecuencia describe a medios como CNN como “el enemigo del pueblo”.

En las últimas semanas ha intensificado su retórica. En un acto en Minnesota dijo que “los demócratas están dispuestos a todo, a lastimar a cualquiera, a alcanzar el poder que tanto añoran. Quieren resistirse, obstruir, causar demoras, demoler. Quieren destruir”.

Esta semana afirmó, sin ofrecer pruebas, que terroristas se habían infiltrado en la caravana de centroamericanos que se dirigen a Estados Unidos. También elogió a un legislador republicano que le dio un empellón a un periodista. El Southern Poverty Law Center, que monitorea los actos de intolerancia, opina que no hay “equivalencia moral” entre la retórica agresiva de los dos partidos, según Heidi Beirich, directora del Intelligence Project de la organización.

“La verdad es que la gente que recibió estas bombas –los Clinton, (Barack) Obama y George Soros– han sido demonizados en forma horrible por la derecha. No solo los neonazis, sino también por gente como Donald Trump”, manifestó Beirich. “Tiende a haber una relación entre la retórica demonizadora y la violencia”. En todo el país abundan los republicanos que sienten que los demócratas representan una amenaza real. Y los candidatos republicanos insisten en ese mensaje.

En un acto de campaña del fin de semana, el candidato republicano a la gobernación de la Florida Ron DeSantis dijo que “no queremos que el estado de la Florida sea el criadero de George Soros y la izquierda radical”, afirmó DeSantis. “Mira todo lo que está pasando con estas turbas y la violencia que promueven”.

López Obrador estalla contra Loret de Mola.- La Consulta sobre el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) ha hecho que muchos mexicanos y extranjeros no entiendan cómo una decisión de Estado puede ser anulada por el hecho de que quien debe darle continuidad, en este caso el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quien decide cuestionarla pero no asume el costo político y entonces encubre su determinación en la coartada de la democracia. “El pueblo es sabio, no se equivoca”.

Por estos días, múltiples opiniones y comentarios se han vertido en este proceso para que la ciudadanía vote y decida cuál será el futuro del NAIM, (determinación que en opinión de muchos ya tomó López Obrador en favor del Aeropuerto Militar de Santa Lucía) entre los que destaca el de Carlos Loret de Mola, por la penetración del medio y su servicio de noticias en la empresa Televisa, pero también en El Universal y Radio Centro, lo que le permite divulgar por tres canales y para diversos públicos, sus puntos de vista.

En el día que inició la Consulta y con la expresión de diversas voces que critican el método, Andrés Manuel López Obrador descalificó al periodista Carlos Loret de Mola por la forma en la que comenta la Consulta sobre el NAIM. Calificó el presidente electo al periodista de pregonero y sugirió que hay medios de comunicación con intereses en la obra aeroportuaria.

“Realmente es muy irresponsable la manera en que está manejando la información en Televisa. Este periodista diciendo que hay incertidumbre, que va a haber devaluación, de manera muy irresponsable. Lamento que esto se dé. Yo entiendo que hay intereses económicos de por medio, pero hay que poner por  delante el interés general, no se puede apostar así a asustar a la gente, crean un ambiente de inestabilidad sólo porque no les gusta la Consulta. La verdad es que esta es la mejor forma de resolver los problemas”. (Proceso, 25 de octubre de 2018)

El periodista Loret de Mola ha discrepado de la forma en la que López Obrador ha procedido para llevar a cabo la Consulta sobre el NAIM, en los medios a su alcance ha manifestado con mayor o menor detalle que la consulta “es una derrota histórica para la izquierda que durante décadas luchó a favor de los procesos de democracia directa y participación ciudadana abiertos, transparentes y confiables”. Considera Loret de Mola que la consulta carece de rigor metodológico, es sesgada y no ofrece garantías para los votantes, señala que parece un ejercicio para que el resultado sea el que quiere el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.

Sobre los efectos de la determinación de realizar la consulta sobre el NAIM Loret de Mola ha comentado que los mercados están reaccionando negativamente ante la percepción de que el presidente electo está a favor del aeropuerto de Santa Lucía porque el ejercicio es una simulación para derrotar la opción de que continúe la construcción en Texcoco. (El Universal, 19 de octubre de 2018)

Las expresiones de López Obrador sobre el trabajo del periodista Loret de Mola, que claramente discrepa sobre la forma de tomar esta determinación de Estado, pueden ser consideradas como de intolerancia, rasgo de su personalidad muy comentado entre quienes conocen su temperamento y que hace que se asemeje al presidente Donald Trump.

Por lo demás, creo que todos estamos bien.