Análisis a Fondo

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  • Lorenzo pretendió parar al Senado
  • Mandó a los técnicos a argumentar contra el Plan B
  • Sólo Monreal y senadores de oposición lo acogieron
  • Por Francisco Gómez Maza

 

RedFinancieraMX

 

Los senadores de Morena declinaron escuchar a Lorenzo. El diálogo entre ellos está cancelado. El presidente consejero del INE ha renunciado a su papel de árbitro electoral y se ha convertido en una más de las oposiciones al presidente López Obrador.

 

El senador Ricardo Monreal Ávila, como presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, sin embargo, recibió a Córdova Vianello, al resto de los consejeros y a personal técnico del órgano jurisdiccional, para “dialogar” en torno al Plan B. El objetivo de Córdova y sus amigos era, obviamente, frenar la aprobación por parte de la Cámara Alta de la Reforma Electoral del mandatario morenista, que les quita pingües prebendas y grandes privilegios a los altos funcionarios del INE.

 

Sólo acompañaron a Monreal Ávila en la reunión con la gente del INE senadores de los partidos y grupos de la oposición; los morenistas se abstuvieron y aquellos que estaban programados por Monreal se disculparon a última hora.

 

La reunión de los funcionarios del INE con Monreal se realizó en el salón donde sesionan los miembros de la Jucopo en la mole arquitectónica del Senado.

 

Monreal, sin embargo, tuvo que aclarar que era importante atender a Córdova Vianello y su cuadrilla. Pero advirtió que eso no significaba que las reformas legales cambiarían de acuerdo a lo que defiende Córdova Vianello.

 

El feneciente consejero presidente del INE iba con la clara intención de que el negocio millonario llamado INE no se tocara. Y no se toca, pero por el presidente López Obrador, enemigo de la “democracia” de los grandes dividendos al estilo Salinas de Gortari-Woldenberg-Córdova.

 

El derechizado hijo del gran Arnaldo Córdova, aquel historiador, politólogo, jurista, escritor, académico y político izquierdistade los fundadores del Partido Socialista Unificado de México, donde se desempeñó como diputado federal de 1982 a 1985, durante la LII Legislatura del Congreso de la Unión; y también participante en la fundación de Morena, partido en el que militó hasta su muerte, fue al Senado a hacer un último intento de parar el Plan B, con argumentos técnicos que no son infalibles y que sólo pretenden parar la aprobación de una  reforma legal iniciada por el presidente López Obrador y sólo porque es López Obrador, quien, al igual que Arnaldo Córdova, busca una democracia en la que participe el pueblo trabajador, que hasta hoy en día es sólo la carne del cañón de las derechas. Gente de la clase media pobre – aspiracionista, por supuesto – cae redondita en el garlito de sedicentes periodistas y políticos en defensa de una democracia con poder y sin pueblo. Una democracia sólo para participación de representaciones de las clases dominantes de la sociedad mexicana.

 

Pero en esas quedaron. Lorenzo se quejó amargamentem ante Monreal Ávila, primero, y luego ante el grupo de reporteros que cubre las actividades cotidianas de los senadores. Se quejó y se quejó. Y hasta imploró. El Plan B es totalmente antidemocrático. Destruye la estrategia del Consejo General del INE para salvar la democracia en las elecciones , sobre todo, ahora que están a la vuelta de la esquina las de Coahuila y el Estado de México y las elecciones federales en las que se elegirá al sucesor de López Obrador.

 

Claro que Monreal Ávila les explicó a los periodistas y justificó el diálogo con Córdova y sus huestes. El diálogo nutre la democracia, les dijo monreal en un boletín de prensa. El senador dijo que los que hablaron en el encuentro no fueron los funcionarios, encabezados por Córdova Vianello, sino los encargados de las áreas técnicas del Instituto, quienes presentaron inquietudes sobre la organización de los procesos electorales que vienen. Estos técnicos electorales, dijo Monreal, detallaron a los coordinadores parlamentarios las implicaciones de la reforma electoral. 

 

En el encuentro, el personal técnico del INE advirtió de serios problemas que conllevaría la reforma de AMLO, que está a punto de aprobar el Senado. Es decir, acotó, respecto a la instalación de las casillas, a la cadena de custodia de los paquetes electorales, a la vigilancia y seguridad del proceso electoral, a las mesas, los funcionarios, la autoridad y los recursos para ello.

 

Monreal aclaró que  en el proceso legislativo pendiente en el Senado, nadie de los funcionarios del INE se involucró, nadie lo deliberó, nadie lo discutió, “porque ellos saben y nosotros sabemos que el proceso legislativo por concluir sólo abarca un artículo, el artículo 12, y todos sabemos que nadie puede alterar eso. 

 

Sobre el proceso, Monreal indicó que todo el paquete que contiene la normatividad de las cuatro leyes electorales en materia electoral, esas no se pueden modificar porque ya se aprobaron por ambas Cámaras y sólo se regresó al Senado un solo artículo que, sin estar aprobado ese artículo, no puede concluirse el proceso legislativo. 

 

Al encuentro con Córdova Vianello solamente asistieron los coordinadores parlamentarios del PAN, Julen Rementería del Puerto; del PRI, Miguel Ángel Osorio Chong; de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda; del PRD, Miguel Ángel Mancera Espinosa; del Grupo Plural, Gustavo Madero; así como el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales Segunda, Rafael Espino.

 

También estuvieron Xóchitl Gálvez Ruiz y Josefina Vázquez Mota, del PAN; Claudia Ruiz Massieu Salinas, del PRI; así como los senadores Raúl Bolaños-Cacho Cué, del PVEM; y Noé Castañón Ramírez, de Movimiento Ciudadano.