- Hay repunte en algunas variables, pero bajan la confianza empresarial y del consumidor
- Por Gerardo Flores Ledesma
RedFinanciera
La iniciativa privada del país subrayó que a pesar de que el consumo creció más de lo previsto en marzo y la inversión fija bruta reportó su mayor avance en 5 meses, crece la preocupación por un entorno de incertidumbre de los agentes económicos para el mediano y largo plazo.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) lanzó señales de alarma, porque en mayo se debilitaron variables como la confianza empresarial y del consumidor.
El INEGI ya dio a conocer previamente que durante el primer trimestre del año la economía creció 0.3%, ligeramente por arriba de su estimación oportuna que anticipaba un avance de 0.2%, desempeño que pudo ser impulsado por el beneficio del periodo vacacional de semana santa.
También se dio a conocer que el indicador de consumo privado en el mercado interno aumentó 0.8% en el mes, superando notoriamente su estimación oportuna que consideraba un avance de 0.2%. Con este resultado, su comparación anual fue de 5.9%, su mayor avance desde enero del 2023 cuando tuvo un repunte de 7.6%. Este comportamiento refleja un incremento anual de 3.0% en el consumo de bienes y servicios de origen nacional y uno de 25.8% en los de origen importado.
La inversión fija bruta también mejoró modestamente en marzo al registrar un incremento mensual de 0.8%, que fue su mejor desempeño en los últimos cinco meses, sobre todo porque repuntó 1.3% la inversión en construcción, después de dos meses consecutivos a la baja, en tanto que la inversión en maquinaria y equipo se elevó 0.5%, nivel menor al alza de 2.9% de un mes antes.
Por su lado, la inflación mostró un incremento de 4.69%, con lo que ya acumula tres meses consecutivos con una tendencia al alza.
El CEESP dice que se debe considerar que este comportamiento refleja un repunte en la inflación no subyacente, que en mayo fue de 6.19% anual, su mayor incremento desde enero del año pasado, mientras que la inflación subyacente fue de 4.21%, su nivel más bajo desde abril del 2021, lo que es una buena señal si se considera que es el rubro que mejor representa la evolución de los precios.
No obstante todas las cifras subrayadas, en su análisis el CEESP precisa que hay otros indicadores como la confianza empresarial y del consumidor que indican más cautela por parte de los especialistas.
Los indicadores de confianza empresarial fueron negativos en mayo, ya que el del sector manufacturero tuvo una baja mensual de 0.4 puntos, el del sector construcción una de 2.1 puntos y el del sector comercio 0.6 puntos.
En su comparación anual la confianza empresarial del sector construcción se redujo en 2.7 puntos y la del sector comercio 2.4 puntos. La confianza del sector manufacturero se elevó 0.4 puntos, que además de ser su menor registro desde enero del 2023, muestra una clara tendencia a la baja.
Por su parte, el indicador de confianza del consumidor también tuvo un comportamiento negativo en mayo al disminuir 0.5 puntos.
La mayor preocupación de los consumidores se centró en su opinión acerca de la situación económica del país que hoy, comparada con la de hace 12 meses, bajó 1.1 puntos. Esto ocasionó que respecto al mismo mes del año pasado la confianza aumentara 2.0 puntos, que fue su menor avance en los últimos doce meses.
Especialistas privados y del gobierno coinciden en que la economía se frenará este y el siguiente año, hasta ubicarse en niveles de 2.1%, cifra muy por debajo del promedio anual de los últimos 30 años