- Continúa la baja en semiconductores
RedFinancieraMX
Las bolsas de Europa iban a la baja hoy, al momento de abrir los mercados en EE. UU., con el índice FTSE 100 perdiendo 1.01%. El DAX baja 0.91%, el Euro Stoxx 50, perdiendo 0.91%, el CAC 40, 0.7%. El IBEX 35 bajaba 0.9%, de acuerdo con datos de la plataforma de inversión multiactivos eToro.
Las bolsas de EE. UU. abrieron a la baja, con el Dow Jones perdiendo 0.1%, el S&P500 bajando 0.6% y el Nasdaq 0.6%. A la inquietud por las alzas de tasas se suman hoy el recrudecimiento de la guerra de invasión a Ucrania y el regreso de medidas antiCovid-19 en China.
El Banco de Inglaterra continúa su intervención del mercado de bonos en Gran Bretaña, advirtiendo que la venta masiva de deuda esta provocando inestabilidad financiera. El rendimiento de los bonos a 10 años se cotiza actualmente en 4.53, lo que ha lanzado a los fondos de pensiones a tomar medidas para evitar pérdidas financieras.
El precio del petróleo también va a la baja esta mañana, ante el aumento de posibilidades de recesión en el mundo por los factores ya mencionados. En especial, el aumento de pruebas de Covid-19 en Shanghai está poniendo nerviosos a los mercados petroleros. El WTI está de nuevo en niveles de 89.61 dólares, con el Brent en 94.73 dólares por barril.
En este contexto el FMI advirtió que las perspectivas económicas seguirán a la baja, al recortar su previsión de crecimiento mundial a 2.7%, desde el 2.9% que había proyectado en julio pasado. “Lo peor está por venir, y para mucha gente 2023 se sentirá como una recesión”, dijo Pierre Olivier Gourinchas, economista en jefe del FMI. El pronóstico de crecimiento en EE. UU. bajó a 1.6% en 2022 y a 1% en 2023. Las previsiones para México bajaron a 2.1% en 2022 y 1.2% en 2023, de acuerdo con el organismo.
La temporada de reportes trimestrales empieza el viernes, con las información de JP Morgan Chase, mientras las acciones de semiconductores siguen cayendo ante las noticias de una baja en las ventas de computadoras personales. Nvidia, Intel, Qualcomm caen entre 1.5% y 4.5% esta mañana.
Inflación de EE. UU. es la próxima gran prueba para los mercados nerviosos
El informe de inflación de EE. UU. del jueves es la próxima gran prueba para los nerviosos mercados, y para la Fed. La inflación general alcanzó un máximo del 9.1% en junio, pero el descenso ha sido lento, mientras que la inflación subyacente está de nuevo cerca de los máximos. Pero estos datos son retrospectivos. Todos los indicadores prospectivos (ver a continuación) muestran una disminución significativa de las presiones sobre los precios y esto es crucial para los mercados. La alta inflación ha impulsado el ciclo de aumento de tasas más agresivo de la Fed en la historia reciente, aplastando las valuaciones de las acciones y avivando el riesgo de recesión y daños a las utilidades. Independientemente del número exacto de inflación del jueves, este debería dar tranquilidad de que la inflación ha alcanzado su punto máximo y que el tope del ciclo de tasas de la Fed está en el horizonte.
Los costos de la cadena de suministro se han derrumbado drásticamente desde sus máximos pandémicos. Los indicadores del mercado laboral ahora están mejorando, la vivienda y los aumentos de las rentas se están desacelerando, la gasolina y los precios de los productos básicos más amplios están bajando, y los precios de los automóviles usados también están cayendo.
Crucialmente, las expectativas de inflación también han estado cayendo, tanto en los mercados financieros como entre los consumidores. Esto contrasta marcadamente con la década de 1970, cuando las expectativas no ancladas impulsaron la espiral inflacionaria de la década perdida. Esto muestra que la Fed todavía tiene mucha credibilidad y significa que nuestro caso base es un ciclo de tasas más corto y agudo.
Prevemos una caída de las expectativas de inflación de EE. UU. y un aumento de los riesgos de recesión, lo que anclará los rendimientos de los bonos. Esto debería aliviar parte de la enorme presión que se ha observado sobre las valuaciones este año, y es necesario para ayudar a compensar la probable debilidad continua de las previsiones de crecimiento de las utilidades.
La caída generalizada en los indicadores clave de inflación también aumenta nuestra fe en una próxima desaceleración del aumento de tasas de la Fed y un tope de ciclo en el primer trimestre de 2023. Esto apoya un fondo de mercado. No es un pivote de la Fed, sino el primer paso necesario antes de eventuales recortes de tasas más adelante en 2023. Este es el desencadenante clave para el próximo mercado alcista.