Condiciones climáticas extremas y sequías a nivel global amenazan con provocar presiones inflacionarias

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RedFinancieraMX

 

Severas sequías han afectado a varios países del globo durante los últimos meses, consecuencia de fenómenos climáticos como el de “La Niña” en el pacífico, la degradación de la tierra por su sobreexplotación y efectos del cambio climático. Las condiciones ambientales están comenzando a tener efectos sensibles en la economía global.

En China, la provincia industrial de Sichuan anunció que extenderá cortes de electricidad hasta el 25 de agosto por los bajos niveles del río Yangtze, que han reducido la producción de electricidad en hidroeléctricas.

Esto implica un probable cierre de fábricas en la región, que afectará la producción de manufacturas a nivel local y podría minar a cadenas productivas globales. Empresas como Apple, Foxconn, Toyota y Volkswagen operan plantas en Sichuan. En Estados Unidos, las sequías han afectado la producción de bienes agrícolas como el algodón, del que se podrían perder hasta el 40% de las cosechas en el año. También se han dejado de sembrar otros productos en vastas áreas de tierra del Suroeste de Estados Unidos, dada la escasez de agua. En Europa, los bajos niveles del rio Rhin en semanas previas han reducido sustancialmente el flujo comercial, en una de las arterias más importantes para el movimiento de bienes industriales y energéticos de la región.

Italia ha declarado también emergencia por los niveles del río Po. En México, durante los últimos meses cerca del 70% del territorio ha sufrido problemas de carestía de agua. El Instituto Mexicano de Tecnología del Agua ha considerado ésta como la peor sequía en al menos 10 años, con daños en cultivos. Las condiciones climáticas globales pueden convertirse en un nuevo choque que eleve los precios de energéticos, a medida que la baja disponibilidad de agua reduce la producción de hidroeléctricas y plantas nucleares. También podría mantener al alza las presiones sobre los costos del transporte, obstaculizar el funcionamiento de cadenas productivas por cortes eléctricos o mantener presiones al alza en los precios de alimentos.