- Abandonadas, 90 por ciento de las 22 mil chinampas de Xochimilco: Ricardo Rodríguez Saavedra
- Hay nuevo atractivo: el programa “De la chinampa a tu mesa”
- Por Victoria González Prado
RedFinancieraMX
I/II
El 11 de diciembre de 1987 la Unesco declaró Patrimonio Cultural de la Humanidad a Xochimilco porque es aportación cultural de México al mundo, sitio de tradiciones ancestrales que incluyen la agricultura lacustre, única en el mundo, que data de centurias antes del asesinato de Cuauhtémoc y es último vestigio, junto con Tláhuac, del piélago de lagos y lagunas cuyo centro fue cuna de la grandiosa Tenochtitlán.
Xochimilco, palabra náhuatl que bien puede significar “campo florido”, parte importante de la montaña de agua (altépetl) como se cree se consideraba al altiplano, tiene particular importancia por la existencia de las chinampas, testimonio de antigua técnica agrícola mesoamericana desarrollada y compartida por varios pueblos del Valle de México.
El método agrícola que utilizan es prehispánico en el que el lodo que está en el fondo del canal es la materia prima más importante pues contribuye a que los canales no se sequen. La intención principal es mantener el cultivo y producción de esta área que se traduce en fuentes de trabajo y en conservación de una de las zonas ecológicas más importantes de la Ciudad de México
Fuimos invitados a recorrer lo que hace tiempo es conocido como la Venecia mexicana, ahora protegida como Reserva Ecológica de Xochimilco. Lo hicimos placenteramente durante 40 minutos a bordo de la trajinera “Mi amor”.
Llegamos a Cuemanco una mañana muy soleada y abordamos la rústica embarcación, en cuyo centro había dispuesta una mesa con recipientes llenos de guacamole acompañado con totopos, de ensalada preparada con distintos vegetales, que le daban sabor muy diferente distinto del de los que conocemos, y aguas frescas.
El paisaje en las riberas y algo más allá, salpicado con casas rústicas, nos aleló y casi sin darnos cuenta del tiempo transcurrido llegamos a las chinampas. Me sorprendió la calidez y el amor de la gente que las trabaja, y cómo lo disfruta y lo presume.
Los paisajes de esa reserva ecológica son indescriptibles, se escuchan el rumor del viento filtrándose entre la fronda de la extensa arboleda, el sonido de pájaros e incluso la respiración de Ismael, el remero, que parecía no agotarse.
Toda el área es, además, refugio para dos mil 254 especies de fauna, en especial el ajolote, especie endémica en peligro de extinción, y alrededor de 212 especies de aves residentes y migratorias.
Xochimilco es humedal de alta importancia ecológica para la Ciudad de México y para el mundo, y está considerado como sitio “Ramsar”. Confieso que no sabía que así se designa a los humedales protegidos considerados cunas de diversidad biológica y de los entornos más productivos del mundo.
México ocupa la segunda posición de países con mayor número de sitios “Ramsar”, pues cuenta con 142, que en conjunto ocupan ocho millones 657 mil 57 hectáreas.
En 1971 se organizó la Convención de Ramsar, llamada así porque en la ciudad iraní Ramsar se firmó el tratado intergubernamental para las acciones nacionales y de cooperación internacional para conservar y hacer uso racional de los humedales y sus recursos.
Esos espacios destacan como lugares de importancia internacional pero, lamentablemente, el ser humano es su principal depredador mediante extracción de agua, crecimiento urbano, relleno para convertir en terrenos habitacionales o sumideros de basura, y a veces los destruye sin ton ni son.
Ricardo Rodríguez Saavedra, creador del programa “De la chinampa a tu mesa”, en la chinampa ubicada a 3.7 kilómetros dentro de la Reserva Ecológica de Xochimilco, a la que se llega por el embarcadero en Cuemanco, nos contó que creó mercado a través de varias redes de consumo directo, para que tengan salida todos los productos que ahí se cultivan, a través del programa “De la chinampa a tu mesa”.
En tienda online puedes adquirir canastas armadas con diferentes productos orgánicos y precios que llegan a tu casa cuando lo requieras o bien pedir lo que prefieras.
En las chinampas se cultiva lechuga romana, sangría, orejona francesa, escarola, acelga, perejil, espinaca, cilantro, alcachofa, verdolaga, betabel, chicharos, tomates, rábanos, cebollas, pepinos, calabacitas, coliflor, brócoli, zanahorias, habas, romero y mucho más. Sin faltar productos de animales libres y de pastoreo y domésticos: leche, pollo, huevo, mole, pipián, chiles, masa, tamales y gran lista que resulta imposible mencionar.
Ricardo aseguró que “hacemos agricultura en esta área natural protegida que tiene superficie de siete mil hectáreas y en ellas se concentran alrededor de 22 mil chinampas censadas por la Universidad Autónoma de México (UNAM), campus Xochimilco, pero 90 por ciento de ellas están abandonadas”.
“Las chinampas son terrenos de cultivo de producción intensiva hecho a mano. Comenzaron a construirse hace muchos años en el lago de Xochimilco y los agricultores buscaron áreas lacustres pantanosas de poca profundidad. Se calcula que se gestaron en los siglos XIV al XVI y por su majestuosidad han sido objeto de atención mundial.