- Rescatar documentos originales, ayuda a reinterpretar la historia oficial/ (Primera de dos partes)
- Por José Antonio Aspiros Villagómez
Opina la historiadora Josefina Moguel, quien será premiada por su labor
RedFinancieraMX
La historiadora Josefina Moguel Flores recibirá una mención honorífica por su trayectoria en el rescate de fuentes y documentos de diversos personajes, durante una ceremonia que tendrá lugar el 20 de noviembre en el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM).
En esa fecha será conmemorado el aniversario 108 de la Revolución Mexicana, y ella estuvo dedicada por décadas al manejo de fondos documentales de destacados protagonistas de esa etapa de la historia nacional.
Dirigido por la historiadora Patricia Galana, el INEHRM hará en esta ocasión la entrega de los premios “José C. Valadés” a la trayectoria en el rescate de memorias y testimonios al doctor Javier Villarreal Lozano; “Manuel González Ramírez” por su labor en cuanto a fuentes y documentos al maestro Jesús Adolfo Castañón Morán; “Daniel Cosío Villegas” por su trabajo de investigación histórica sobre México contemporáneo (1968-2000) a la doctora Alicia Hernández Chávez, y el “Clementina Díaz y de Ovando” a la doctora Sara Sefchovich Wasongarz por sus vasta obra relacionada con historia social, cultural y de género.
Acerca de su mención honorífica dentro del premio “Manuel González Ramírez”, la historiadora Moguel comentó a este tecleador que estaba “gratamente sorprendida” de haber sido propuesta por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) División de Historia, ya que ella no pertenece a esa institución.
Ese premio se sumará a la Medalla de Acero al Mérito Histórico “Capitán Alonso de León” que le otorgó con anterioridad la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística.
Egresada de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y con nueve lustros de experiencia profesional, durante 36 años fue jefa del Archivo del Centro de Estudios de Historia de México Carso (CEHM, antes Condumex) y está por terminar una investigación en torno al general Juan Andrew Almazán, personaje contra quien se cometió un fraude electoral en las elecciones presidenciales de 1940, según pruebas que existen en el fondo documental del ideólogo agrarista Antonio Díaz Soto y Gama (1880-1967).
Colecciones de documentos como los de este personaje, existen muchas y son con las que ha trabajado la historiadora Josefina Moguel, para quien “el rescate de archivos, de fuentes primarias, es sustancial para el conocimiento, investigación y reinterpretación de la historia, la cual ha sido distorsionada oficialmente”.
Sólo que para reconstruir esa historia oficial con la consulta directa de información primaria, es necesario elaborar índices y guías con el apoyo de una “especialísima metodología” -dice Moguel- a fin de que los investigadores no pierdan años sumergidos en la búsqueda de los datos deseados, sino que en unos segundos los encuentren. Y ella ha dedicado décadas a esa tarea de apoyo.
Según nos comentó, son muchos quienes “se dicen investigadores” y aseguran “haber consultado los archivos, en su caso los del CEHM Carso o Condumex, pero no es verdad que lo hagan. No tienen tiempo para explorarlos, especialmente a Carranza, porque necesitarían más de cinco años para ello”.
Y lamentó que cuando recurren a una guía que “les agiliza toda consulta”, esos investigadores “no citan en su bibliografía a los autores de las guías e índices” de que se valieron, lo cual “sería ético” hacer, pero si los mencionaran no podrían convencer “a quienes los consultan, que en verdad vieron los archivos”. Si no fuera por las guías e índices como los que ella ha elaborado, “difícilmente podrán indagar dónde se encuentra el tema o personaje de su interés”.
Explicó que por tal razón “la mayoría de los investigadores menosprecian este tipo de trabajo profesional, (que) ciertamente es ímprobo, pesado, muy lento y con resultados a largo tiempo”, y consideró que “la cultura en México ha perdido el significado del rescate de los archivos”, los cuales “por cierto, ya no hay muchos, y han sido dañados, destruidos por negligencia o dolo”.
(Concluirá)