- Café, la segunda bebida más consumida en el mundo después del agua
RedFinanciera
La crisis logística global, afectaciones en la cadena de suministro y un aumento en precios internacionales de hasta el 50%, son algunos de los retos que enfrentan las exportaciones cafeteras mexicanas, aunque estas no han frenado el consumo de la bebida, aún en pandemia.
De acuerdo a un análisis de Drip Capital México, fintech especializada en financiamiento y factoraje, el café es una de las varias exportaciones de productos agroalimentarios mexicanos que han encontrado importantes mercados en el plano internacional.
Por ello, en el marco del Día Internacional del Café, celebrado este primero de octubre, Drip Capital se dio a la tarea de analizar el panorama exportador de este producto.
Por cualidades de topografía como altura, clima y suelos que permiten cultivar, la producción de café en México es considerada como una de las mejores del mundo, posicionándose como el décimo primer productor de café a nivel mundial, de acuerdo a datos de la Organización Internacional del Café.
Aunado a ello, México destina alrededor del 3.24% del total de su superficie cultivada para producir café, según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y se producen alrededor de 3.5 millones de sacos al año, lo que revela un panorama prometedor para el producto.
Análogamente, de acuerdo a una de las comercializadoras de café veracruzano, a nivel nacional y de exportación, que forma parte de la cartera de clientes de Drip Capital, si bien, Estados Unidos es el principal destino para el café mexicano, países como Alemania, Reino Unido, Italia, España, Francia, Bélgica y Países Bajos, también son de los principales clientes de las mezclas mexicanas, junto con Corea y Japón.
No obstante, y como respuesta inmediata a la pandemia por la Covid-19, gobiernos de todo el mundo implementaron una serie de medidas y restricciones para mitigar los efectos del virus, con lo que se vio impactado el sector cafetero.
Dicha afectación en la industria cafetera se vio directamente relacionada con la crisis logística y de transporte: la mezcla de restricciones, escasez de contenedores y espacios, así como la falta de mano de obra, resultó en un incremento significativo en los fletes para su exportación por la vía marítima, el medio principal para llegar a sus destinos en Europa y Asia.
“Si bien las medidas y restricciones representan una limitante para la producción de café, la pandemia no representó impedimento para dejar de consumirlo. No obstante, de acuerdo a este exportador cafetero, cliente de nuestra firma, se observó una afectación en la disminución de cosechas del producto”, señala Edmundo Montaño, director general de Drip Capital México.
De tal modo, el financiamiento con herramientas como el factoraje, se convierte en una alternativa para cubrir los costos operativos imprevistos en la cadena de suministro, a la vez que ayuda a las empresas exportadoras para sustentar sus operaciones, mantener la liquidez y cubrir con la demanda del mercado.
Y aunque se visualiza un escenario de incertidumbre, donde las expectativas pudiesen parecer negativas, el exportador revela que, en realidad el consumo del café no disminuyó significativamente, pues, a pesar de que muchos hoteles, restaurantes y cafeterías cerraron por un tiempo, el consumo en el anaquel y supermercados aumentó también, en buena medida.
Del mismo modo, el incremento en los costos de la cadena de suministro ocasionó un incremento en los precios internacionales de más del 50% en los últimos 3 meses, algo que, de mantenerse y en medida que se dispersen los efectos en la logística de exportación, beneficiará mucho a los productores que llevaban ya muchos años con un costo bajísimo, por lo que ahora es una buena oportunidad para comercializar el café a mejores precios.
“La producción de café es determinante para el desarrollo económico y social del campo mexicano, pues ha logrado conquistar el paladar internacional por las técnicas de cosecha artesanal, entre otros factores. Por ello, los exportadores cafeteros deben identificar los retos y oportunidades que presenta el mercado para rediseñar sus estrategias logísticas y financieras. De este modo, se permitirá incrementar su productividad”, finaliza el directivo de Drip Capital.