- Siempre tuvo vocación por la extracción de ese mineral, al cual debe su nombre
- Hubo muchos intentos por modificarlo, pero sin éxito
- Por Alejandra Pérez Bernal
RedFinanciera
A dos horas y 15 minutos de la capital del país, se ubica Villa del Carbón, otro Pueblos Mágicos que detenta el Estado de México y que goza de una gran herencia histórica y cultural.
Villa del Carbón siempre tuvo vocación por la extracción de ese mineral, al cual debe su nombre, y que ha mantenido así, pese a los diversos intentos por cambiarlo.
Se trata de un pueblo tranquilo, vetusto, cultural, digno de paisajistas y con un encanto colonial incomparable.
Sus orígenes nos remontan al año 200 a.C., y su conformación se hizo gracias a las etnias nahua y otomí.
Su nombre significa “Cima del Cerro”.
¿Qué podemos hacer en Villa del Carbón?
Los primero es caminar por el pueblo; admirar sus calles empedradas y visitar la Parroquia de la Virgen de la Peña de Francia, una edificación del siglo XVIII, y que es digna de admirar por sus bellas torres hechas de roca y su nave de cañón.
En el centro, se destaca la Plaza Hidalgo, un espacio tradicional de indiscutible belleza colonial, donde debemos observar con detalle las fachadas a su alrededor.
Es necesario admirar el edificio del Antiguo Palacio Municipal, su iglesia, las añejas casonas, así como los portales del área.
Imperdible es la visita a la Casa de la Cultura, donde podrás apreciar objetos arqueológicos que se exhiben en el museo.
Las artesanías
El mercado de artesanías de Villa del Carbón es un sitio para quienes gustan de piezas de colección con productos hechos con piel y lana.
Hay todo tipo de artículos, desde chamarras, bolsos y zapatos, hasta chalecos, cinturones y guantes.
En los arcos del centro de Villa del Carbon, se vende rompope, un elixir tradicional que no debes dejar de probar.
Desde este Pueblo Mágico se puede hacer un viaje de 20 kilómetros a la Presa del Llano, un parque ecoturístico, desde donde se observa el sistema de ríos que alimentan la presa.
En este lugar vale la pena pasear en lancha, admirar el paisaje, y disfrutar la naturaleza.
Muchas actividades más se pueden practicar en este montañoso pueblo: Desde bicicleta y camping, hasta cabalgata, canotaje, escalada, kayaking, pesca deportiva, motocross, tirolesa y senderismo.
Guisos locales
Los guisos locales que se pueden disfrutar son la barbacoa de carnero, los buñuelos, el mole rojo o verde, las carnitas de cerdo, el chicharrón, la trucha, los tamales y el rompope artesanal.
Cuando pueda, no olvide visitar Villa del Carbón. Su fiesta cívica es el 10 de marzo y la religiosa el 8 de diciembre, cuando se venera a la Virgen de la Peña de Francia.