- No es reelección es prolongación
- Por Carlos Ramos Padilla*
RedFinancieraMX
Escuché los pronunciamientos de Porfirio Muñoz Ledo que ahora anda en busca de la dignidad y para ello, entre otros, convocó a Cuauhtémoc Cárdenas y a Ifigenia Martínez, (por cierto, un reencuentro 35 años después).
Porfirio anda molesto, incomodo, enojado por la serie de trampas inmerecidas que Morena y Mario Delgado le han impuesto a pesar del peso real y específico que representa el Universitario (órdenes que él sabe y dice, vienen desde arriba). Pero más allá, hace unos días me permití reflexionar en mi colaboración que Porfirio llegó tarde con sus piezas oratorias reclamando al Ejecutivo sus desatinos lo mismo que a sus compañeros legisladores.
Y llegó tarde porque sostengo que Porfirio fue parte de los cambios que nos han llevado a lo que estamos viviendo, aunque parezca que hoy quiera deslindarse.
Di mis razones. Pero leyendo y escuchando a Porfirio que para mí es obligatorio me llamó la atención dos aseveraciones.
La primera es que AMLO miente consistentemente y que si no roba deja robar en abundancia, así lo subrayó. La otra es que estima el político que amlo está ensayando la posibilidad no de reelegirse, sino de prolongar, extender su mandato armando las condiciones necesarias para tal fin.
Sostiene Porfirio que amlo siempre ha vivido de la provocación y da ejemplos, algo que, a estas alturas, decirlo, también es tardío.
Porfirio, entre otros estrategas e ideólogos, no sólo no impidieron el ascenso del tabasqueño, sino que lo cobijaron, lo arroparon y dejaron que creciera. Han permitido que hoy el presidencialismo absoluto esté presente.
Ellos, Cárdenas, Ifigenia, el propio González Pedrero, conocen a la perfección la personalidad de amlo y lo constataron cuando fue Jefe de Gobierno.
Sabían las trampas mediáticas de “su dedito”, su Tsuru, respaldaron que la información de los segundos pisos fuera “reservada”, dejaron que por complicidad Sheinbaum escalara niveles. Se habla de dignidad ahora cuando participan del mismo proyecto que Bartlett o Delgado o Ebrard.
Porfirio conoce a la perfección las triquiñuelas de la mancuerna Camacho/Ebrard para destrozar al sistema, a Salinas y a Colosio.
Ahí permanecieron cómplices no por el espantoso silencio, sino porque se adhirieron a ese plan de poder.
Saber que Porfirio hoy infiere que se viene una escalada de movimientos, incluso constitucionales, para encumbrar a amlo por más años en el gobierno, engañando que no se trata de una reelección, es como para alertar a todas las instituciones.
Muñoz Ledo sabrá por qué lo dice ahora, sabrá si lo divulga por su enfado y sabrá si hubiera callado de llegar a la presidencia de Morena.
Porfirio colocó la banda presidencial a amlo siendo presidente de la Cámara de Diputados y en ese momento no endureció ni su postura ni su voz.
No era sorpresa cómo se comportaba amlo en su vida política. Hoy lo reconoce Porfirio, entonces por qué decidió pertenecer a ese grupo, por qué se sumó a Morena, por qué a final de cuentas no detuvo este proceso degradante cuando pudo y vaya que si podía.
AMLO, Muñoz Ledo y todos los políticos de postín han crecido gracias a su participación en los medios de comunicación que hoy atacan. Sus iniciativas, sus propuestas, sus campañas e incluso sus bravuconearías han sido del conocimiento público por los medios de comunicación.
Hoy los traicionan, hoy golpean a los periodistas, ya no respetan a sus interlocutores y cerrar el flujo, los canales de información es llevar al autoritarismo y a la dictadura.
AMLO ya no necesita reporteros y periodistas, tiene a sus cómplices legisladores para hacer lo que le viene en gana con o sin la aprobación ciudadana.
Toma el tiempo de la nación para pontificar, eso cree, en las mañaneras, una tribuna que le ha servido para denostar y atacar.
¿Quizá Porfirio tenga razón en los planes de amlo para perpetuarse en Palacio Nacional, pero llamando a Cárdenas e Ifigenia lo va a impedir? ¿Ya no se acuerda de los pactos entre ellos, ya no hay memoria para aquellas convivencias en donde se pactaba la transferencia de poder sobre la voluntad social o qué la protección a Ebrard luego de los linchamientos de Tláhuac y luego del autoexilio en Francia es reflejo de la alta moral política?
Fuertes las palabras de Porfirio y ante este complejo panorama sólo me atrevería a preguntar: ¿y?
*conductor del programa VaEnSerio MexiquenseTV canal 34.2