- Por suerte, el menor de edad no sufrió ningún daño
- El MP de la Alcaldía de Gustavo A. Madero le dijo que la denuncia no procedía porque las lesiones no pusieron en riesgo su vida y tardan en sanar menos de 15 días
- “Estoy decepcionada de la justicia de mi país”, dice la afectada
- Por Ricardo Contreras
RedFinancieraMX
Este martes, un taxista agredió físicamente con su vehículo y le robó su mercancía a una mujer que iba acompañada de sus dos nietos, poniendo en riesgo la integridad física de la señora y de los menores de edad.
Los hechos ocurrieron alrededor del mediodía, en la Colonia Bondojito, Alcaldía Gustavo A. Madero, cuando la señora Claudia “N”, quien abordó el taxi en el Centro Histórico, llegó a su domicilio y el conductor le cobró una tarifa superior a la que normalmente acostumbra pagar.
La señora Claudia “N” le dijo que si le pagaría el servicio, pero primero tendría que sacar el dinero de su bolsa que venía en la cajuela, donde además estaba la mercancía que había comprado para surtir su negocio.
“No es la primera vez que tomo taxi, se lo que pago siempre y procuro traer en la mano el dinero, llegué a mi destino, me dijo el taxista: son 82 pesos. Le dije: nunca he pagado esa cantidad y me contestó que había mucho tráfico. Le di los 50 pesos que traía en la mano y le pedí que me permitiera bajar a mis nietos, uno de 8 años y al bebé de año y medio, que se había dormido en mis brazos”, relató la señora.
De mal modo, el taxista, que presuntamente responde al nombre de Edmundo Sánchez Ángeles se bajó del taxi, número de placas A8943B, para abrir la cajuela, pero al ver que la señora se tardaba en pagarle, se subió al auto y abruptamente arrancó la unidad mientras que la señora Marcela fue arrastrada con el niño que cargaba en sus brazos mientras intentaba sacar sus cosas.
Por fortuna, el menor no sufrió ningún daño porque la señora lo cubrió con su cuerpo. El otro niño de 11 años fue testigo fiel de los hechos y tampoco sufrió ningún percance. Claudia “N” tiene golpes en la espalda, cadera y rodillas.
Indignada e impotente por las agresiones recibidas, Marcela fue a la Agencia 8 del Ministerio Público, ubicada en la Alcaldía de la Gustavo A. Madero, pero cuál sería su sorpresa que el personal de la citada oficina le dijo que su denuncia era improcedente porque las lesiones no pusieron en riesgo su vida y tardan en sanar en menos de 15 días. También me dijeron que no tenía heridas expuestas, ni perdí ninguna extremidad.
Claudia “N” dice, con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada que esta triste, decepcionada y adolorida.
“Bendito Dios nada que lamentar, mis nietos están bien, estoy golpeada, adolorida, pero el dolor de pensar qué le hubiera pasado algo a mi bebe que tenía en mis brazos a mi otro nieto que también estuvo en peligro. Siento impotencia de ver qué no hay apoyo en el gobierno y no existe la justicia para quien no cuenta con dinero e influencias para recibir la ayuda”, agregó.