- La crisis de la 4T ya es terminal. AMLO, desesperado
- Por Francisco Rodríguez
RedFinancieraMX
Un régimen político llega a su fase terminal cuando sus instituciones y sus operadores han demostrado ser ineficaces, cuando han comprobado tener el peor desempeño de todos los tiempos, cuando se han suicidado políticamente ante su población y ante el mundo. Cuando han caído en la vergüenza propia y ajena.
La crisis general se presenta cuando el Estado se ha arrinconado a sí mismo por incompetencia, cuando sus niveles de parálisis y de ridículo le impiden tener salidas, cuando se ha agotado su capacidad de respuesta ante lo urgente e importante. Cuando ya no sirve más que para nada. Cuando es un peligro para los habitantes.
Y esto pasa porque ya no hay un solo indicador de la convivencia de la sociedad que esté en manos del gobierno en turno para resolver. Cuando no tiene un solo instrumento de compensación, menos de ajuste. Cuando se ha dedicado a destruir todo lo que funcionaba o podía funcionar mejor. Cuando ya no queda nada.
No por nada es que AMLO se ve desesperado. Actúa desesperado.
Se les derrumba a pedazos la llamada 4T.
Paranoia, cerebro desquiciado, soberbia, resentimiento social
Si para cualquier gobierno en el mundo la solución para abordar esta fase terminal fuera robar menos y ponerse a trabajar, para este país no opera, pues nadie quiere poner mano sobre mano. Si la solución fuera aplicar la ley para castigar a los desalmados e indolentes, para aquí no es, porque no habría quién cerrara las puertas de la bartolina.
Lo único que queda es la paranoia, el cerebro desquiciado de los soberbios y de los resentidos sociales. Esa argamasa que se bate cotidianamente frente a todos y que identifica a quienes la sufren con la baja estima, la frialdad para engañar, la incapacidad para la crítica, la hostilidad con el entorno, el autoritarismo, los episodios depresivos, el egocentrismo y la desconfianza.
El delirio de grandeza. El sujeto empoderado cree haber sido elegido para desarrollar una misión muy importante, o hasta para salvar al mundo de algún peligro indefinido, inexistente. Responde con hostilidad, con desapego, con el complejo de que son todos los demás los que lo deturpan y lo reprueban.
Pemex y CFE perdieron en un año 600 mil millones de pesos
Hace unos cuantas semanas The Financial Times alertó sobre la tragedia mexicana que se avecinaba. Dijo que la terrible catástrofe de Venezuela era una clara advertencia de lo que otros cuatro años de la Cuarta Transformación podían hacerle a México. Cualquier dinero, de dentro y de afuera, sería insuficiente para detener la debacle.
Justicia selectiva. Gobierno selectivo. Corrupción selectiva. Eso es lo que resultó de la Cuarta Corrupción. Pemex y la CFE perdieron en un año seiscientos mil millones de pesos de nuestros impuestos. Las pérdidas, reconocidas por ellos mismos, son 40% superiores a las del 2019. ¡Y todavía se quejan de las auditorías!
Ahogan a propósito el presupuesto del Instituto Nacional Electoral para que no pueda supervisar las elecciones intermedias, para que le deje al “caudillito” todo el campo. Para que aplique, como en el África dictatorial su amuleto de Barthélemy Boganda, para que él vigile las elecciones y decida quién gana.
Félix Salgado y Florián Tudor, consentidos del “caudillo”
La Suprema Corta avala la “Ley chayote” de Peña Nieto para que el gobiernito no rinda cuentas de las escandalosas maletas que gasta en su publicidad mentirosa. Para que nadie gaste más que lo que ellos puedan, para fortalecer el engaño y los perfiles de los candidatos impresentables.
A Félix Salgado Macedonio le retiran, por el empuje electoral de las mujeres, el registro de la candidatura a Guerrero, pero se amarran el dedo, le respetan sus derechos políticos, para ver si después, gane quien gane en la contienda regular, cualquier manotazo lo pueda insertar como gobernador interino o sustituto. Las intenciones están cantadas.
Le respetan sus derechos, igual que al jefe de la mafia rumana en Quintana Roo, el hotelero Florián Tudor, a quien no investigan, sino le dan el trato super especial de que lo atienda la secretaria de Seguridad Pública, para ver qué se le ofrece, en qué lo pueden ayudar para darle inmunidad ante la ley, igual que a todos sus compinches del régimen, desde el señor de las ligas, hasta los miembros de la familia imperial.
Y los gobernadores de la Alianza Federalista no se amilanan
Se quiere amarrarles la manos a los gobernadores de los estados de la Federación por tres vías: el asesinato de sus presupuestos, las amenazas de cartitas de redención electoral que no cumplirán en Palacio Nacional, y con las amenazas de desafuero al gobernador de Tamaulipas, ése que es un dolor de cabeza, porque tiene a los adversarios del régimen de su lado.
Los gobernadores de la Alianza Federalista no se amilanan, aunque los medios comprados digan todo lo contrario. Nadie puede amilanarse ante los fuegos fatuos de las bocazas que no saben integrar, nunca han podido, un solo expediente de averiguación que no sea corrupto desde sus fundamentos jurídicos.
En este trimestre el decrecimiento del PIB será de menos 4.5%
El Frijolito Jiménez Pons, director de Fonatur, en sus nuevas funciones de juez y parte afirma que el juzgado que concedió el amparo contra el proyecto descabellado y anti ambiental del tren chu chú que destroza la selva maya, ¡carece de imparcialidad y conocimiento de las leyes ecológicas!
Y mientras todo éso pasa, los conspicuos analistas de todos los bancos y sectores financieros calculan que este primer trimestre el decrecimiento económico del producto interno bruto llegará al menos cuatro y medio por ciento, lo que hará una depresión anual del menos doce.
Lo que sumado al menos veinte que arrastramos desde que la Cuarta Corrupción tomó posesión del cargo, arrojará una suma muy parecida al menos treinta por ciento de decrecimiento neto. Una tragedia para el empleo, para la alimentación, para la moneda, para la subsistencia. Una tragedia cantada, igual que todos sus despropósitos.
Dentro de 14 semanas, en la intermedia, recibirán su respuesta
Pero el régimen continúa con sus guerritas distractoras, tapando sus errores con las conocidas posiciones antiimperialistas que no tiene cara para hacer, toda vez que firmaron las cláusulas que los obligaban a acatar los términos de las energías limpias, la revisión de las cuestiones energéticas y la limpieza en los ámbitos sindicales y laborales.
La hipocresía es la única que no es selectiva. Esa se reparte monda y lironda hacia todos los confines. Mientras, el regimencillo de Tepetitán se encuentra ya en su fase terminal, juzgado por sus socios y por todos los que escriben u opinan sobre México aquí y en el extranjero.
No cabe duda: la crisis terminal se presenta cuando el Estado se ha arrinconado a sí mismo. Cuando su nivel de parálisis y de ridículo ha agotado sus capacidades de respuesta. Cuando ya no sirve para nada.
Ya no se puede caer más abajo. No hay lugar. Dentro de catorce semanas, en la elección intermedia, recibirá su respuesta.
¿No cree usted?
Índice Flamígero: Hace casi un año, a mediados de marzo de 2020, y tras haber asistido a la reunión nacional de los banqueros en Acapulco, López Obrador reconoció que en ocasiones le “desespera” el avance lento con el que se está logrando la transformación del país, pero confió en que para 2024, cuando concluya su sexenio, sea difícil revertir los cambios concretados.