- No sé que decir
- Por Carlos Ramos Padilla*
RedFinancieraMX
Creí haber perdido me capacidad de asombro, pero ya la recuperé y fue por una declaración del presidente López Obrador que frente a la nación reconoció que asiste a las mañaneras sin estrategia, sin plan, sin saber qué decir y que sólo lo anima el conversar y transmitir lo que siente. “No crean que yo vengo aquí con ideas…esteeee…analizadas, ¿no? Yo vengo aquí y pos hablarles…mmmmm..de manera sincera…mmmmm…a decirles lo que siento, lo que…eeeh….eeehh….conozco, todo lo que es mi experiencia.
Entonces se me salió, así, de lo del narcoestado”. Si, lo que acaba de leer es una transcripción de la voz del Ejecutivo en la mañanera.
Me parece una irresponsabilidad, una falta absoluta de respeto y una tomada de pelo, en eso orden o en desorden.
Que un presidente despierte a la nación sin saber qué es lo que va a decir, que mensaje transmitirá, que decisiones tomará es muy lamentable.
Pero tampoco todo esto es cierto. amlo si sabe de qué manera va a manejar su presencia, tan es así qué hay gráficas, hay rotación de funcionarios, hay temas que distraen.
Si prepara lo que hace. No es creíble que llegue a un Estado de la República y diga que no sabe de qué va a hablar cuando ya hubo una avanzada de burócratas y empleados que diseñaron hasta la escenografía que se utilizará.
Imagínese usted que llegue el maestro a clases y frente a los alumnos les manifieste que no sabe de qué va a hablar. Piense usted en un empresario que frente a su Consejo de Administración les comenté que sólo está ahí para que sepan qué siente.
Es una vergüenza. En este país ya los muertos no se cuentan por días sino por horas y el presidente presume que improvisa, que no lleva ideas.
Estamos a punto de perder el 11% de nuestra economía y el presidente se levanta a platicar de lo que en apariencia se le ocurre en ese momento.
Es de locos, es saber que en realidad el país no tiene rumbo, ni liderazgo. ¿Cómo es que el presidente cita al secretario de la defensa si no sabe de qué va a hablar? ¿Cómo es que se atreve a presentarse en una entidad federativa si no conviene con el gobernador los temas sustantivos, los conflictos a resolver? ¿Se imagina a un conductor de un espacio informativo en televisión que se presente “a cuadro” y le hable de que Juárez se casó con Carmelita Romero Rubio porque ni para eso iba preparado? Es para recuperar, le decía, la capacidad de asombro, pero también de susto.
Se puso, dijo a hablar de un narcoestado (fíjese que grave), por qué le “salió así” nada más, sin ideas, sin pensarlo cuando meses atrás ordenó liberar a Ovidio y saludar a la mamá del Chapo.
Pero habló del narcoestado pues, pues, por qué si, nada más ni nada menos.
Hoy usan a Lozoya como moneda de cambio electoral, acuerdan calendario para que impacte para las elecciones, presionan a la familia del detenido y alertan a la Fiscalía de la probable prescripción de los delitos y …amlo no sabe de qué hablar.
El fiscal da a entender que a Lozoya lo consienten parque está dando nombre y a Rosario Robles porque no hace lo mismo.
Hay que recordar que Robles se presentó de manera franca y voluntaria a declarar, a dar la cara y fue aprehendida.
La diferencia es que Lozoya fue declarado prófugo.
Todo esto suena a cachetada, queda como una broma de pésimo gusto para una nación que demanda resultados y no dichos, avances y no ocurrencias, decisiones, no mentiras.
*Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y tv
*Conductor del programa Va En Serio MexiquenseTV canal 34.2