- Donald Trump fue resguardado en el búnker, ante la amenaza creciente de protestas
- Anonymous hackea páginas de la policía en Minnesota y los radios de policías de Chicago
RedFinancieraMX
La muerte del afroamericano George Floyd en Minnesota a manos de un agente de la Policía, provocó tensión en más de una docena de ciudades de Estados Unidos, lo que provocó que se movilizara a la Guardia Nacional -se habla hasta de 11 mil efectivos-, luego de que Donald Trump hubiera sido resguardado en el Búnker de la Casa Blanca por recomendación del Servicio Secreto.
Al cumplirse 5 días de disturbios, tensión vehículos policíacos incendiados y decenas de detenidos, el movimiento Anonymous hackeó las páginas del Departamento de Policía en Minnesota y los radios de los uniformados de Chicago, mientras ayer domingo imperaba el toque de queda en las calles y la presencia masiva de militares en las calles.
La muerte de George Floyd genero el sábado una noche de miedo y violencia especialmente en las calles de Nueva York, Filadelfia, Dallas, Las Vegas, Seattle, Des Moines, Memphis, Los Ángeles, Atlanta, Miami, Portland, Chicago, e incluso la capital Washington.
Cabe recordar que George Floyd murió a manos de un agente de la Policía, tras ser detenido tratando de usar un billete falso de 20 dólares.
Muchas rutas fueron cortadas, autos y comercios incendiados, mientras las fuerzas del orden, desplegadas en gran número, respondieron con gas lacrimógeno y en algunos casos con balas de goma.
Ante eso, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ordenó este domingo que 400 integrantes de la Guardia Nacional se desplieguen en el estado para hacer frente a las protestas.
En tanto, 150 guardias nacionales están en Miramar, al norte de Miami, otros 150 en Camp Blanding, el principal centro de entrenamiento de esta fuerza de reserva compuesta por voluntarios, y 100 en Tampa (oeste de Florida), según informó Helen Aguirre Ferré, directora de comunicación de DeSantis, en un mensaje de Twitter.
Aguirre escribió que esas unidades especialmente adiestradas van a apoyar a las fuerzas policiales en tareas como el control del tráfico y de multitudes para “preservar la paz y la seguridad pública”. Por segundo día consecutivo se han registrado protestas pacíficas en el sur de Florida para reclamar el fin de la violencia policial contra los afroamericanos que, en algunos casos, han derivado en incidentes.
En Fort Lauderdale, sureste del estado, las protestas acabaron con incidentes y la policía disparó gases lacrimógenos a los manifestantes para dispersarlos, pero volvieron a congregarse y aún permanecen en las calles. En Miami, al contrario que el sábado, no hubo cargas ni disparos de gases de la policía, pero sí se vivieron algunos momentos de tensión cuando grupos de manifestantes se encararon a los agentes, que no respondieron a la provocación.
En un determinado momento la policía anunció que la manifestación era ilegal y que iba a proceder a detener a los participantes y la mayoría abandonó la zona. Las manifestaciones surgidas en EE.UU. a raíz de la muerte de George Floyd cuando estaba el pasado lunes bajo custodia policial en Minneapolis (Minesota) llevan el lema de “No puedo respirar”. Esas son las palabras que Floyd, de 46 años, dijo en el momento que un policía, que no fue detenido y acusado hasta el viernes, le puso la rodilla sobre el cuello durante varios minutos para reducirlo.
En Miami rige un toque de queda desde la ocho de la tarde (00.00 GMT) y en Tampa desde las 19.30 (23.30 GMT) hasta nuevo aviso. La misma medida fue aplicada en Washington, tras una noche de saqueos e incendios durante las protestas. La alcaldesa Muriel Bowser anunció este domingo un toque de queda y la activación de la Guardia Nacional para evitar nuevas revueltas, pese a lo cual ya se registraron algunos incidentes.
Enfrentamientos con la policía
En un mensaje en su cuenta de Twitter, la alcaldesa informó que el toque de queda regirá en todo Washington a partir de las 11 de la noche (03.00 GMT) y hasta las 6 de la mañana (10.00 GMT) del lunes. También indicó que ha activado a la Guardia Nacional del Distrito de Columbia para que apoyen a la Policía Metropolitana en el control de las manifestaciones que se han producido en los últimos días y que el sábado derivaron en saqueos, vandalismo e incendios.
Pese a los preparativos de la ciudad, cientos de manifestantes se congregaron en horas de la tarde para marchar desde la Universidad Howard hacia el centro de la ciudad para iniciar la protesta. En la calle 14, ya se produjeron los primeros enfrentamientos con la policía, después de la quema de un coche patrulla, y los agentes lanzaron pelotas de goma y arremetieron contra los presentes, incluidos varios periodistas, entre ellos un camarógrafo de EFE/EPA.
Varios cientos de manifestantes se congregaron también en el Parque Lafayette, frente a la Casa Blanca, donde en los últimos días han arrancado las protestas por la muerte de George Floyd. La policía, con equipo antidisturbios, se mantiene situada tras las vallas localizadas frente a la verja del jardín de la Casa Blanca, sin que se hayan registrado incidentes.
En Nueva York, también miles de personas se echaron a la calle de nuevo este domingo para protestar. Como en las tres jornadas anteriores, las protestas comenzaron pacíficamente, con ciudadanos marchando por las calles de Nueva York portando carteles que leían “Justicia para George Floyd” o “La vida de los negros importa”, y gritando el “no puedo respirar”.
Sin embargo, también era palpable la indignación contra la propia policía de Nueva York, que ha sido criticada por su actuación del sábado después de publicarse en las redes sociales videos en los que se veían automóviles de las fuerzas del orden embistiendo a manifestantes o agentes echando espray pimienta en el rostro de ciudadanos con las manos en alto.
Por ello, se escuchó con insistencia la frase “NYPD, Suck my dick” o “Fuck NYPD” en las manifestaciones del domingo, que se produjeron en múltiples zonas de Nueva York, entre ellas Bryant Park, en el centro de Manhattan, o el Barclays Center, en el centro de Brooklyn.
La de Barclays Center fue una de las más numerosas, donde miles de personas se reunieron con el puño alzado y carteles que pedían la “abolición de la policía” en una zona en la que se apreciaban claramente aun los destrozos del sábado, con mobiliario urbano destruido y numerosos escaparates rotos.
Trump al búnker
La prensa estadounidense publicó que mientras los manifestantes se congregaban frente a la Casa Blanca el viernes por la noche en Washington, DC, el presidente Donald Trump fue llevado brevemente al búnker subterráneo durante un período de tiempo.
El presidente estuvo allí por poco menos de una hora antes de ser llevado arriba. No está claro si la primera dama Melania Trump y Barron Trump también fueron llevados con él.
Ataca Anonymous
Mientras las respuestas tras la muerte de George Floyd son masivas y las calles de Estados Unidos se llenan de personas reclamando los derechos de las personas negras y el cese de la violencia policial contra ellos, los activistas de Anonymous reaccionaron ante lo sucedido y tras amenazar al Departamento de Policía de Minneápolis a través de un vídeo en Facebook, procedieron al hackero de su página. Lo mismo le sucedió al Departamento de Policía de Chicago.
Aseguran que dentro de las comisarias se encuentran “delicuentes” pero sus propios compañeros les protegen y se “niegan a enjuiciarles”, como si lo harían en el caso de que fuera “uno de los ciudadanos a los que han jurado proteger”.
Por ello, piden que se condene por asesinato al ex policía Derek Chauvin, aunque aseguran que no confían en su capacidad de impartir justicia, por lo que ellos mismos van a difundir sus actuaciones. “No confiamos en su organización corrupta para llevar a cabo la justicia, entonces expondremos muchos de sus crímenes a todo el mundo”.
Anonymous también hackeó los radios de policía de Chicago poniendo el “Fuck the police” y ha asegurado que filtrará al mundo todos los crímenes que han llevado a cabo protegiendo a los “poderosos”.
Lo primero que han hecho tras difundir este mensaje ha sido hackear las radios de policía de Chicago poniendo la canción Fuck the police.