Picotazo político

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  • Por Miguel Ángel López Farías

RedFinancieraMX

Cada año se escucha el mismo estribillo de que vendrá un gasolinazo, de que la canasta básica subirá, cada año se asoman nuevas amenazas fiscales para que ahora si los contribuyentes paguen lo que deben y los que no lo hacen comiencen a hacerlo, cada año es la misma historia…solo que en este capítulo debemos añadir que se suman  elementos que ponen nerviosos a más de uno…el principal es la falta de rumbo en materia económica y como pocas veces la sociedad, de los que gustan de leer y enterarse saben que nada garantiza de que la situación en torno a sus bolsillos vaya a ir mejor…y a pesar de que en estos días el ritmo mental y cotidiano es de escasa concentración en esos grandes rubros si se ha sentido nunca sensible baja en los noveles de confianza entre los consumidores, no se repara la misma dinámica que en anteriores años se veía en cuanto a conductas de consumo, muchos mexicanos decidieron gastar menos, los viajes o salidas se han limitado a menos días o en lugares cercanos y económicos.

La sabiduría popular no se equivoca pues se respira en el ambiente esa ansiedad de lo que precede a las grandes tormentas, en donde un gobierno agradece a el gobierno de Bolivia el que le ponga un nuevo tanque de oxígeno con un “escándalo” diplomático para que el público nacional no se entere de la fuga en sus bolsillos y algo peor, el que no se ve claro para donde demonios vamos.

Pues si algo es claro es que este 2020 no garantiza ningún n tipo de buena noticia, en donde las patas de la mesa de la economía se encuentran suspendidas entre ocurrencias y chabaqueneria de gobierno, en donde los iconos de los machetazos de los recortes presupuestales no han detenido su sangría, en donde esta navidad y el año nuevo que viene le ha significado a muchos padres de familias un escondido llanto ante el hecho de que fueron despedidos y por los pantalones del gobierno de la ciudad o el federal no se les liquida.

El gobierno ha negado hasta el cansancio el que nos encontremos en recesión, pero en las calles se respira distinto…y repito, no se trata de ser ave de mal agüero, pero nos hemos negado a escuchar el crujido de las bases de una sociedad que está a punto de estallar por que sencillamente su economía es un desastre, y hago mención de la clase media, esa misma que vive del crédito, de la las tarjetas…ahorita no se tiene el impacto real del meteoro de los gastos por las épocas navideñas, pero en enero las vendas comenzarán a caer.

Por ello, el que vengan gasolinazos, aumentos a productos y servicios y el aire de mayores cierres de empresas y despidos no significan para nada buenas noticias…insisto, solo que en palacio nación les caiga el veinte de lo que se está viviendo en las calles, y no solo en el imaginario mundo feliz de sus cuentas.