- “Más si osaré un extraño enemigo…”.
- Por Paco Ramírez
RedFinancieraMX
@ramirezpaco
Valiéndose de dos leyes propias, apoyadas en tratados internacionales y convenios bilaterales, Estados Unidos, se prepara para, bajo la denominada Ley Patriota, declarar como Organizaciones Terroristas Extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés) a los cárteles de la droga mexicanos y así poder incursionar militarmente en nuestro país y “limpiarnos la casa”.
Las cosas en la relación México – Estados Unidos no pintan muy bien, la amenaza del muro fronterizo, la aplicación de aranceles por el tema migratorio y ahora se suma una nueva: mandar al ejército a cazar narcos, una relación así ni aunque se caigan muy bien los mandatarios y se digan amigos.
La idea se viene cocinando desde marzo pasado, pero la gota que derramó el vaso fue la matanza en los límites de Durango y Chihuahua, de la familia LeBaron de doble nacionalidad, estadounidense y mexicana.
Trump no dejó pasar la oportunidad para ofrecer la ayuda y ciertamente el presidente López Obrador tampoco dejó pasar un minuto para reiterarle que no se permitirá ningún tipo de intervención en nuestro país.
La posibilidad de que grupos armados ingresen a territorio mexicano amenaza nuestra soberanía.
¿Por qué le tenemos que permitir que él cumpliendo sus leyes pase a violar las nuestras?
Aunque también nos confronta con una realidad: El Gobierno Mexicano solo, no ha podido controlar a estos grupos criminales y de nada sirven las reuniones de gabinete en las que no se aterriza nada salvo ver cómo se incrementa el número de muertos por el narcotráfico.
No se cuenta con las armas, la inteligencia ni la voluntad política de enfrentar con el uso de la fuerza militar, a las organizaciones criminales que, dicho sea de paso, representan también enormes intereses económicos, políticos, policiales y trasnacionales.
Remover todo este enjambre no es tarea fácil y, por supuesto, requiere de ayuda externa que no nos caería mal. Si la presencia extranjera proviene de naciones aliadas, no está por demás considerar la oferta, eso sí, poniendo un plazo para su retiro incondicional
Cooperación, asistencia sí, sin armas y exigiendo de paso que Estados Unidos ponga un alto a la venta y tráfico de armas hacia nuestro país e intensificar las campañas para inhibir la demanda de drogas en el mercado más grande del mundo.
Ahora bien que tanto realmente preocupa la soberanía o el hecho de que las investigaciones destaparían el enorme enjambre de corrupción e intereses creados con políticas infiltrados, empresarios que se han prestado por la buena o por la mala al lavado de dinero, políticos que los han cooptando o comprado o que igual son incluso son parte del negocio
Importante sin duda, acabar con el cáncer del narcotráfico que tantas vidas ha cobrado y que si me lo permiten tiene a la soberanía hecha un guiñapo
Cooperación sí, intervencionismo no.