- Por Miguel Ángel López Farías
RedFinancieraMX
Ud los ha visto, espaldas encorvadas, camisas arremangadas, bien peinados, con todos los años a cuestas, canosos, ellas hermosamente maquilladas, nunca he observado a alguien desaliñado, sucio o con aspecto descuidado, maestros de la amabilidad, casi todos con lentes de graduación, con movimientos lentos pero firmes, ordenados en sus tareas, y aunque su trabajo es mecanizado siempre tienen un comentario que realizar, una sonrisa que ofrecer , manos arrugadas, con pecas, esas que hablan de todo el tiempo que han acumulado …platican entre ellos con decencia, perfumadas ellas, guapas, risueñas cuando se les responde con un “buenas tardes linda”…ellos, otoñales y apuestos…algunos con corbata…llevan tiempo formando ese ejercito blanco, crearon una nueva familia, es la generación de los años 50, jubilados todos pero llenos de energía, atrás dejaron los cartabones de irse a descansar a la casa, ser atendidos por los hijos o nietos, nada de eso…ellos desean y saben que los músculos aun resisten varias horas parados, que una pastilla o una pomada por las noches, al final de sus turnos habrán de ser el bálsamo para llegar listos a el siguiente día…lo sé porque he platicado con ellos, se sentían solos, ignorados en casa, ausentes de una vida productiva, hay desde maestros y obreros, desde licenciados y amas de casa.
Sus historias personales están repletas de vivencias y de grandes luces, son sobrevivientes a crisis económicas, han visto pasar a más de 8 presidentes, saben de política y de religión y no importa si discuten, ya saben lo que es la tolerancia y la emplean para no desperdiciar el tiempo que el cielo les ha regalado…esconden tristezas y fracturas del corazón tras un conjunto de arrugas que reflejan su carácter, aquel que fue bueno o malo, duro o tierno, pero que con la caída del reloj se obligaron a dejar todo aquello que les envenenaba el ego…¿ud los ha visto? ¿los ha saludado? ¿ha sido atendido por ellos? ¿le han preguntado por la familia? ¿negara que al verlos nos recuerdan a aquellos padres y abuelos a los cuales no les hemos llamado0? ¿verdad que al saludarles ellos regresan con mucha emoción el gesto?
Es el ejercito blanco, ellos cambiaron la estampa aquella en donde niños y niñas embolsaban sus compras del super, “los cerillos” rompieron la barrera del tiempo y en un lapso se hicieron abuelos…cierto, son hombres y mujeres plateados que trabajan en grandes tiendas comerciales, personajes de antaño que se apuran con sus manos para no ser menos que el cajero o cajera, presurosos a despegar bolsas o traerles cajas de cartón, miradas que ocultan muchas voces anteriores pero que se resisten a quedarse quietos en un sofá…
Ángeles con piel arrugada y espíritu de chamacos…¿sabe? Dan ganas de abrazarlos, de platicar con ellos, de preguntarles por la familia, pero no hay tiempo, la fila es larga, así que con un saludo y unas palmaditas ( sin olvidar una buena propina) sabemos que les hemos dado trato digno…solo que se queda ese nudo en la garganta, es compasión por esos seres que ya dejaron atrás vida y esfuerzo…y que nos debería obligar a preguntarnos sobre su situación laboral, ¿ganan bien? ¿están satisfechos con lo que reciben? ¿el estado los protege? ¿los supermercados les dan trato digno? ¿son explotados? ¿gozan de algún tipo de servicio médico en las tiendas? ¿ cuántas horas trabajan? ¿les queda lejos sus hogares?
Los problemas en México son enormes, se apilan , se juntan, lo sabemos, se habla de ejecuciones, de asesinatos , de estafas, de corruptos , de violencia desmedida, de recesiones económicas…se le da atención a las medallas panamericanas, a las playeras del fut, los ninis y los milenials …hemos visto nacer a ladies y lords en redes sociales…cierto, la agenda está llena, pero existirá la capacidad para mirarlos y preguntarles si están bien? ¿para escucharlos y atender sus necesidades? ¿en qué momento los convertimos en fantasmas? A nuestros abuelos en los supermercados, a ellos, a ese ejercito blanco les va este picotazo, y les hago llegar un abrazo enorme, con cariño y mucho respeto…
¿y ud ya le hablo a los suyos?