- El motor de un proyecto de nación más verde
RedFinanciera
En un contexto donde las inversiones sostenibles y las prácticas ESG son cada vez más determinantes para la competitividad empresarial, la industria hotelera mexicana comienza a consolidar un cambio estratégico: apostar por energías limpias , especialmente la solar, no solo como un gesto ambiental, sino como un modelo de negocio más rentable, eficiente y alineado con las expectativas del mercado global. Hoy, los hoteles sustentables en México no solo buscan atraer huéspedes responsables; están sentando las bases de una industria turística que aporta valor económico, ambiental y reputacional al país.
Este cambio ya no es opcional para la industria hotelera, es una exigencia del mercado y de los compromisos globales de sostenibilidad. Reducir las emisiones de carbono en un 66% para 2030 y en un 90% para 2050, según lo establecido en la COP 25 y documentado por el International Tourism Partnership (ITP), se ha convertido en un reto operativo y reputacional. En este escenario, la energía solar fotovoltaica destaca como una de las soluciones más efectivas para avanzar hacia modelos de negocio más sostenibles y eficientes.
“La instalación de paneles solares y sistemas de almacenamiento energético en hoteles representa una decisión estratégica que responde a la demanda global por operaciones más sostenibles y resilientes”, afirma José María Galdón, director general de Greening México. Añade que “los viajeros, los inversores y las grandes cadenas hoteleras están exigiendo operaciones más sostenibles. Hoy, quien no apueste por energías limpias en el sector, corre el riesgo de quedarse fuera del mercado”.
Energía solar: hacia la eficiencia energética en hoteles
La adopción de energía solar en hoteles se ha convertido en un elemento diferenciador en términos de rentabilidad y eficiencia operativa . En un país como México, con condiciones ideales de radiación solar en gran parte de su territorio, esta tecnología representa una oportunidad concreta para reducir costos y elevar la competitividad de los establecimientos turísticos.
Desde el punto de vista financiero, este cambio también representa una ventaja competitiva, ya que la energía representa entre el 5% y el 20% de los costos operativos en los establecimientos de hospedaje, según datos de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE).
Además, con el apoyo de sistemas BESS (Battery Energy Storage Systems), los hoteles pueden almacenar la energía generada durante el día para su uso nocturno o en momentos de mayor demanda, lo que garantiza un suministro continuo, reduce la dependencia de la red eléctrica y protege contra fluctuaciones tarifarias.
Otro beneficio técnico importante es la posibilidad de monitorear en tiempo real el rendimiento energético. Gracias a la digitalización de los sistemas de gestión, los hoteles sustentables en México pueden optimizar el consumo y detectar desviaciones, alineándose con las nuevas prácticas de hotelería inteligente que cada vez más viajeros valoran.
Mucho más que ahorro: reputación, innovación y futuro
Invertir en energía solar no solo genera ahorros, también abre las puertas a certificaciones ecológicas de alto prestigio, fundamentales para la estrategia de posicionamiento de un hotel y para acceder a mercados internacionales.
México es líder en América en la obtención de distintivos como Green Key —que reconoce a establecimientos comprometidos con la sostenibilidad— y Blue Flag, concedido a destinos costeros con altos estándares en educación e información ambiental. En el periodo 2024-2025, se informó que el país cuenta con ambos reconocimientos para diversos espacios, posicionándose como referente internacional en turismo sustentable.
Esta reputación no solo impacta en la imagen del hotel, sino que incrementa directamente el valor de la propiedad. Los inmuebles que operan con sistemas de energía solar y cuentan con certificaciones sustentables mejoran su calificación crediticia, facilitando el acceso a financiamiento para expansión, remodelación o desarrollo de nuevos servicios.
En paralelo, la inversión en energía solar permite a los hoteles diversificar sus fuentes de ingreso, por ejemplo, a través de alianzas con agencias de viajes responsables, programas de fidelidad enfocados en el turismo consciente y marketing verde. Todo esto fortalece la rentabilidad a largo plazo, diferenciando al hotel en un mercado cada vez más competitivo.
Beneficios claves de la energía solar en hoteles
La implementación de sistemas solares fotovoltaicos en hoteles genera beneficios tangibles que van más allá de lo ambiental. De acuerdo con el directivo de Greening, estos son algunos de los principales:
• Ahorro significativo en costos de electricidad.
• Reducción de emisiones contaminantes y mejora del perfil ESG (ambiental, social y de gobernanza).
• Acceso a incentivos fiscales y financiamiento verde.
• Independencia energética y resiliencia ante apagones.
• Mejor percepción por parte de los viajeros conscientes.
• Contribución al cumplimiento de metas globales de sostenibilidad.
Hacia un turismo mexicano más responsable y competitivo.
La energía solar ha dejado de ser una apuesta a futuro para convertirse en un factor clave de competitividad en la industria hotelera mexicana. En un contexto global donde los criterios ESG, la eficiencia operativa y la sostenibilidad definen cada vez más las decisiones de inversión, los hoteles que integran soluciones energéticas limpias están mejor preparados para reducir riesgos, optimizar costos y fortalecer su modelo de negocio frente a las exigencias del mercado actual y futuro.
La transición hacia hoteles sustentables en México es una oportunidad para fortalecer la reputación, incrementar el valor de los inmuebles y asegurar la continuidad operativa frente a los desafíos energéticos. “La energía solar es hoy una de las decisiones más inteligentes que puede tomar un hotel; no se trata solo de reducir gastos, se trata de construir un modelo de negocio más competitivo, resiliente y alineado con las demandas del nuevo turismo”, concluye José María Galdón.