- La moneda mexicana mantendría cotizaciones relativamente estables por la falta de eventos importantes
- Por Ricardo Jiménez
RedFinanciera
El peso mexicano mantendría relativa tranquilidad en sus operaciones para las próximas dos semanas, debido fundamentalmente a la inexistencia de eventos importantes, con la perspectiva de seguir manteniendo cotizaciones entre un rango de negociación de 19.0 pesos como precio de soporte y 19.70 pesos como nivel de resistencia.
El único evento que podría generar nerviosismo en el mercado de cambios es la celebración de las elecciones en Estados Unidos, las cuales previsiblemente se llevarían a cabo en martes 5 de noviembre del año en curso, sobre todo si la preferencia de los votantes estadounidenses resulta el candidato del partido republicano Donald Trup por sus comentarios realizados en la pasada candidatura.
En ese sentido, Donald Trump mencionó a México con fines electorales el pasado 16 de junio del 2015, cuando anunció su intención de contender por la presidencia de Estados Unidos. En esa ocasión se refirió a México como el “nuevo China” y señaló que, de construirse una planta de Ford que estaba planeada en México, impondría un arancel del 35% a las importaciones de automóviles de esa planta que entren a Estados Unidos.
El tipo de cambio peso-dólar no reaccionó a este acontecimiento, sin embargo, el 25 de septiembre del 2015, Donald Trump calificó al TLCAN como un desastre, agregando que terminaría o renegociaría el tratado. Ese día, el peso se depreció 0.61% y el lunes 28 de septiembre, se depreció 0.57%.
La paridad cambiaria peso-dólar siguió mostrando una alta volatilidad durante la campaña y tras el resultado de las elecciones del 2016, alcanzó un máximo histórico hasta un nivel de 22.03 pesos por dólar. Como resultado del triunfo de Trump en su primera elección, el TLCAN concluyó, pero en su lugar se firmó el T-MEC y Estados Unidos inició una guerra comercial en contra de China, permitiendo que México se convirtiera en su principal socio comercial.
En esta ocasión, el posible triunfo de Donald Trump podría terminar con el fenómeno de la relocalización, pues empresas que planeaban ubicarse en México no lo harían ante el riesgo de aranceles o modificaciones severas en la revisión del T-MEC a partir de julio del 2026.
El desarrollo del peso mexicano para los próximos meses, estaría influenciado en parte por la evolución del ciclo de los recortes de la Reserva Federal (Fed), además, del apetito al riesgo, que dependerá en buena parte del resultado de la elección de Estados Unidos y otros factores geopolíticos.
El tipo de cambio peso-dólar mantendría una alta volatilidad por las elecciones de Estados Unidos tomando en cuenta como eje central la narrativa de las siguientes semanas. Esto podría presionar a la moneda mexicana llevándola hasta un nivel de 20.60 pesos por billete verde en lo que resta de este año, destacando que su anclaje por “carry trade” será menor relativamente a periodos recientes.
El menor “carry trade” se derivaría de las volatilidades implícitas más altas que reducen el atractivo de este tipo de posiciones, sin destacar repuntes adicionales que son consistentes con las coberturas que típicamente se observan en todos los procesos electorales llevados a cabo en Estados Unidos.
El buen atractivo de la moneda brasileña donde el ciclo monetario se ha tornado más restrictivo y ha existido buenas noticias sobre su calificación soberana, sería un factor que reduciría la entrada de flujos externos al mercado mexicano, generando mayores presiones al tipo de cambio peso-dólar.
El escenario del peso mexicano tanto en corto como el mediano plazo se ve complicado, sobre todo si Dolanda Trump gana las elecciones, con amplias posibilidades de que la paridad cambiaria peso-dólar nuevamente se ubique por arriba de los 20 pesos por dólar y en el 2025 estaríamos viendo cotizaciones por arriba de los 22 pesos por billete verde.
En la presente semana, los participantes del mercado de cambios estarán atentos al anuncio de datos económicos que podría influir en su ánimo, como ventas al menudeo, producción industrial y manufacturera, inicio de construcción de viviendas, permisos de construcción, mientras en México se publicarán cifras de la confianza al consumidor y reservas internacionales.